La última vez que José Luis López Tovar (40) fue visto, fue al final de la tarde del 24 de agosto, cuando salió de su casa ubicada en la urbanización El Encanto en Los Teques. Tras una incansable búsqueda, su familia halló su cadáver este 9 de septiembre en la morgue de Bello Monte.
El fallecido era chofer del transporte público en la ruta Los Teques–Carrizal, en los Altos Mirandinos. La alarma inició el día de su desaparición, pues según detallaron a El Pitazo sus deudos, nunca dormía fuera de su residencia.
Tres horas después que el conductor salió de su casa en Los Teques, Bomberos del Distrito Capital rescataron a un hombre malherido que presuntamente fue arrojado desde el distribuidor de Antímano. No poseía documentos ni ninguna de sus pertenencias.
Fue llevado por los funcionarios al Hospital Miguel Pérez Carreño, a donde llegó inconsciente por lo que no pudo decir su nombre ni aportar dato alguno de su familia. Falleció al día siguiente.
El cadáver fue llevado a la morgue de Bello Monte, donde fue fotografiado y anexado a la lista de personas sin identificar. El resultado de la autopsia, arrojó que antes de caer del elevado, recibió un golpe en la cabeza, lo que hace presumir a funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), que fue asaltado y posteriormente arrojado al vacío.
Durante dos semanas, la familia buscó a López Tovar en diferentes centros de detención, centros de salud y en la morgue de Los Teques. Hasta que revisaron la lista fotográfica de los cuerpos que yacen en Bello Monte y lo hallaron.
Por: Agencia