lunes, julio 1

Alejandro González Iñárritu: «Si el cine es un templo, Kurosawa es su Dios»

El realizador Alejandro González Iñárritu alabó hoy al director japonés Akira Kurosawa con motivo de su visita a Japón para recibir un premio que lleva su nombre y que supone un galardón a toda la cerrera cinematográfica del mexicano.

«Era un cineasta increíble. Si el cine es un templo, Kurosawa era uno de sus dioses», dijo González Iñárritu durante una rueda de prensa celebrada en el marco del Festival Internacional de Cine de Tokio (TIFF) y horas antes de la ceremonia de entrega del premio en el Hotel Imperial de la capital nipona, publica EFE.

El mexicano fue seleccionado junto al director nipón Koji Fukada (Harmonium, 2016) para recibir el premio Akira Kurosawa, que el TIFF revive después de 14 años y que en el pasado fue entregado a cineastas como Steven Spielberg o Yoji Yamada.

El comité de selección del festival decidió otorgar el premio a Iñárritu en reconocimiento a su debut en el cine, «Amores Perros» (2000), «que atrajo la atención mundial al cine mexicano y ha seguido desafiándose vigorosamente a sí mismo para probar algo nuevo con cada película», según señaló el TIFF en un comunicado.

González Iñárritu afirmó que regresar a Tokio «es un sueño hecho realidad» y que recibe el premio «con gran honor».

«Nunca hubiera soñado que volvería aquí 22 años después para recibir un premio que lleva el hombre de uno de mis ídolos y del que además también hay influencia en mis películas», afirma el director, quien se declara fan de clásicos de Kurosawa como «Rashomon» (1950) o «Ikiru» (Vivir, 1952).

«‘Rashomon’ fue una película que mi padre me enseñó cuando era muy pequeño y tuvo una gran influencia en la estructura de ‘Amores Perros’ a través de los distintos puntos de vista», señala y añade que a través del director nipón aprendió el concepto de «el tercer ojo».

González Iñárritu se declara admirador del «profundo entendimiento de Kurosawa del alma y las motivaciones humanas», así como de «sus lenguajes gramaticales» y el hecho de que «nunca se tomara muy en serio a sí mismo» y se considerara siempre un estudiante.

Por: Agencia