martes, noviembre 5

Al menos siete personas heridas deja protesta por un embalse en Francia

Al menos siete personas, entre ellas cinco gendarmes, resultaron heridas este sábado y cuatro fueron detenidas en los enfrentamientos entre las fuerzas del orden y miles manifestantes que protestaban contra un proyecto de embalse de riego en el departamento francés de Deux-Sèvres (centro oeste)

«Tenemos todas las pruebas de que es una manifestación violenta», subrayó en una declaración a los medios Emmanuelle Dubée, la prefecta del departamento (delegada del Gobierno) en referencia a lo ocurrido a primera hora de la tarde en los alrededores de la localidad de Sainte Soline, a una cincuentena de kilómetros al este de la ciudad de Niort, reseñó EFE.

Dubée explicó que los gendarmes recibieron cócteles molotov y proyectiles lanzados con morteros por los entre 3.000 y 4.000 manifestantes, algunos de los cuales se introdujeron en el perímetro de las obras antes de ser desalojados.

En esos choques, en los que los gendarmes hicieron uso de material antidisturbios, hubo cinco heridos entre los agentes y dos entre los manifestantes. La prefecta dijo no poder precisar el estado de unos y otros. Sí que indicó que había cuatro personas arrestadas.

«Las operaciones son particularmente violentas, como esperábamos», hizo notar la delegada del Gobierno, que había prohibido cualquier manifestación el sábado y el domingo en Sainte Soline por el riesgo de altercados ante la convocatoria de una concentración sobre todo por asociaciones ecologistas.

Esa prohibición iba acompañada de la amenaza de multas de 135 euros para los manifestantes y de penas de prisión de hasta seis meses y multas de hasta 7.500 euros para los organizadores.

Las autoridades habían movilizado a 1.500 gendarmes, apoyados desde el aire por helicópteros, para hacer frente a los manifestantes, algunos de ellos encapuchados o con el rostro tapado para no ser identificados.

El motivo de la protesta es el plan para excavar un embalse destinado al riego que se llenaría con agua recogida durante el invierno para, según sus promotores, evitar tener que hacerlo en verano cuando es más escasa.

En realidad, este es uno de los 16 embalses que se quieren construir, con capacidad para hasta 650.000 metros cúbicos cada uno (equivalentes a 250 piscinas olímpicas), para abastecer las explotaciones de unos 400 agricultores de la región.

Pese a estar prohibida, la protesta estaba respaldada por el sindicato agrícola Confederación Campesina, que denuncia un proyecto diseñado para el beneficio de unos pocos.

También acudieron líderes ecologistas como la diputada Sandrine Rousseau o el eurodiputado Yannick Jadot, antiguo candidato al Elíseo en las elecciones de la pasada primavera, que pidió al presidente francés, Emmanuel Macron, que ponga fin a «este proyecto aberrante».

 

Por Agencia