Una mujer de Kitengela, una localidad de ubicada a las afueras de Nairobi, capital de Kenia, actualmente está siendo acusada de matar y comerse partes del cuerpo de su bebé de solo dos años.
El nombre de esta mujer es Olivia Naserian de 24 años, y ahora enfrentará cargos penales por apuñalar a su propia hija identificada como Glory Njeri, abrir su cuerpo y comerse puntualmente su hígado. Ahora la madre comparece ante el tribunal y le tomará 10 días adicionales al tribunal poder continuar la investigación y darle una sentencia apropiada a la infanticida caníbal, ya que alegan que podría tener un grave estado de salud mental.
El terrible crimen que cometió Olivia Naserian, fue descrito en la prensa internacional como “monstruoso”, ya que abrió a la pequeña de dos añitos, Glory Njeri, con un cuchillo de cocina y atiborrando sus entrañas. Fue entonces que los vecinos de una zona de urbanización en Kitengela un pequeño pueblo ubicado a aproximadamente 30 kilómetros al sur de la capital de Kenia le dieron aviso a las autoridades para que llegaran lo más pronto posible a arrestarla por la “sospecha” de asesinato. Esto fue poco tiempo después debido a la zona en la que radicaba la infanticida caníbal.
Finalmente compareció ante el tribunal el pasado martes 25 de enero, donde el magistrado principal le ordenó permanecer bajo custodia durante 10 días más, esto para continuar con la investigación sobre el suceso. Ahora, el cuerpo descuartizado de Glory Njeri, fue llevado a la morgue del hospital de Kitengela para realizarle una autopsia y descubrir todos los crímenes que Olivia Naserian perpetró en contra de su propia hija.
Investigadores alegan que deben estudiar la condición psiquiátrica de la mamá
De acuerdo con la prensa local, los investigadores de Kitengela solicitaron el periodo adicional debido a que están intentando establecer un parámetro sobre la condición psiquiátrica de la joven de 24 años. Esto debido ha que ha tenido comportamientos erráticos desde el día del arresto, hasta la comparecencia en el tribunal. Además, la prensa internacional enfatizó que el jefe de la Dirección de Investigaciones Criminales (DCI) de Kitengela, Benson Mutia, utilizó “terminología arcaica” para describir el caso, él externó que creían que el juzgado les daría más tiempo para investigar este asunto porque necesitan saber “si la mujer es normal” o tiene una grave enfermedad mental como para “hacerle eso a su propio bebé” ya que según ellos fue completamente inexplicable.
Ahondando en el caso, los informes detallaron que hubo testigos presenciales que observaron con horror a través de la ventana como Olivia Naserian apuñaló a su bebé varias veces mientras cantaba himnos y recitaba obsesivamente el alfabeto. Por su parte el diario keniano llamado “The Standar” añadió que hubo una vecina que también cantaba, la tonada temerosa tenía la siguiente letra:
“Nunca volverás a llorar, mi bebé… dormirás para siempre. Te amo, hija mía”.
Por Agencia