La alta comisionada adjunta de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Kelly T. Clements, pidió este sábado «apoyo urgente para un millón de desplazados centroamericanos», tras una visita a Honduras, Guatemala y México.
«Hasta un millón de personas en Centroamérica han sido desplazadas por la fuerza. Es responsabilidad de la comunidad internacional y de todos nosotros ayudar a esas personas a reconstruir sus vidas», expresó la funcionaria de la ONU.
Clements destacó que «nunca» como ahora «ha sido más urgente» un mayor apoyo financiero y técnico a los Gobiernos y organizaciones que trabajan juntos para proporcionar ayuda humanitaria y protección a las personas que se desplazan en Centroamérica y México.
Centroamérica, con cerca de 50 millones de habitantes, registra altos niveles de pobreza y una violencia extrema que se atribuye a las pandillas que controlan amplios territorios y a las organizaciones transnacionales que usan el istmo como puente de la droga producida en el sur del continente y que tiene su mayor mercado Estados Unidos.
La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) dijo este sábado que Clements visitó «comunidades obligadas a vivir bajo el control de pandillas criminales, y conoció a familias que huyeron de sus hogares debido a la violencia y la persecución, agravadas por la extrema pobreza, las condiciones climáticas y la pandemia».
Por Agencia