El papa Francisco destacó el aporte de los migrantes y refugiados a sus países de acogida, un hecho que se reseñó a lo largo de la historia. «Ha sido fundamental para el crecimiento social y económico de nuestras sociedades y lo sigue siendo también hoy», dijo en el mensaje publicado este 12 de mayo para la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado.
En el mensaje para esta jornada, que la Iglesia católica celebra el 25 de septiembre, tiene el título de «Construir el futuro con migrantes y refugiados» y por ello Francisco afirmó que la inclusión de migrantes y refugiados, desplazados y víctimas de trata «es una condición necesaria para obtener la plena ciudadanía», reseñó EFE.
«Construir el futuro con los migrantes y los refugiados significa también reconocer y valorar lo que cada uno de ellos puede aportar al proceso de edificación. Me gusta ver este enfoque del fenómeno migratorio en una visión profética de Isaías, en la que los extranjeros no figuran como invasores y destructores, sino como trabajadores bien dispuestos que reconstruyen las murallas de la Nueva Jerusalén», añadió el papa.
Agregó que «su trabajo, su capacidad de sacrificio, su juventud y su entusiasmo enriquecen a las comunidades que los acogen».
Pero consideró que «esta aportación podría ser mucho mayor si se valorara y se apoyara mediante programas específicos» porque «se trata de un enorme potencial, pronto a manifestarse, si se le ofrece la oportunidad».
Además, aseguró que «la presencia de los migrantes y los refugiados representa un enorme reto, pero también una oportunidad de crecimiento cultural y espiritual para todos» pues «gracias a ellos tenemos la oportunidad de conocer mejor el mundo y la belleza de su diversidad».
Por Agencia