El ministro de Salud de Alemania revirtió una medida para poner fin al aislamiento obligatorio para las personas que dan positivo a COVID-19, diciendo que fue un error y envió la señal equivocada.
El ministro Karl Lauterbach dijo el lunes que la cuarentena obligatoria, usualmente por 10 días —que puede ser reducido a siete con un resultado negativo— sería eliminado el 1 de mayo y remplazado con una recomendación de aislarse por cinco días. Las autoridades locales de salud aún les ordenarían a las personas infectadas en instalaciones de salud que no acudiesen a trabajar.
Lauterbach, que anunció inicialmente el cambio de parecer en televisión el martes, dijo el miércoles que la idea fue “un error del que soy personalmente responsable”, indica una nota de la AP.
“He retirado la propuesta porque habría dado la impresión completamente errónea de que la pandemia se acabó o que el virus se ha vuelto significativamente menos dañino que lo que pensamos anteriormente”, les dijo a reporteros en Berlín.
Apuntó que el martes se registraron casi 350 muertes relacionadas con el coronavirus y dijo que Alemania tiene números de casos “que son demasiado elevados” y que el COVID-19 de larga duración “es un gran problema”.
Lauterbach dijo que el objetivo de la propuesta era aliviar la carga para las oficinas locales de salud y que en lugar de ello lo hará levantando un requerimiento de que los contactos de los infectados queden en cuarentena. Dijo que propondría mantener en vigor un período obligatorio de cinco días de aislamiento para individuos con COVID-19.
Los niveles de infecciones en Alemania han estado bajando y la mayoría de las restricciones por la pandemia han sido levantadas recientemente.
Lauterbach, un epidemiólogo y veterano legislador del Partido Socialdemócrata del canciller Olaf Scholz, fue una de las voces más prominentes en Alemania llamando a la cautela y pidiendo medidas estrictas contra el coronavirus en las etapas iniciales de la pandemia.
Desde que se convirtió en ministro de Salud en diciembre, ha tratado un enfoque equilibrado con los retos políticos de una coalición gubernamental de tres partidos y el impacto de la variante ómicron, que ha causado números elevados de contagios, aunque con síntomas menores.
En la radio Deutschlandfunk, el líder opositor Friedrich Merz atacó lo que llamó un estilo “jadeante” de gobierno, “con decisiones que no duran 48 horas”.
Merz, de la Unión Demócrata Cristiana, criticó además el enfoque del gobierno hacia un mandato potencial de vacunaciones de cara a elecciones parlamentarias el jueves. Scholz está en favor del mandato, pero dejó en manos de los legisladores elaborar propuestas a través de los partidos dadas las divisiones en su propio gobierno.
Por: Agencia