sábado, octubre 5

Despedida de niña ahogada en Rio Grande: «Ahora que usted es mi maestra verdadera, tengo que irme»

Hermosa, divertida y coqueta, así recuerda la maestra Digna Rodríguez a su alumna, la niña Victoria Valentina Lugo Mayor, nacida el 5 de junio de 2014.

«Tuve el privilegio de ser su maestra a tiempo completo, en preescolar, en segundo grado y en tareas dirigidas», recordó con la voz entrecortada, reseñó Un Nuevo Día.

El centro de educación inicial simoncito (Ceis) y la escuela Las Eugenias comparten la misma sede, en la urbanización del mismo nombre, Coro, estado Falcón.

Así que Victoria no solo estudió en las mismas instalaciones y recibió clases de su maestra preferida.

También tuvo cerca a su madre Maryelin Carolina Mayor Barráez, quien además era maestra del Ceis. Además vivían cerca, en la casa C-39-3 ubicada en la sexta etapa de la urbanización.

Entre los alumnos de este plantel no había ninguna más emocionada que Victoria quien recibía el afecto de su madre, maestra y compañeros.

No obstante, los salarios insuficientes, el deterioro de la calidad de vida y la situación país hicieron que Maryelin cambiara de planes.

Resolvió regresar a su natal Maracaibo, aunque dejó que Victoria culminara el primer lapso y tuviera la dicha de compartir con su maestra y compañeritos. Aprobó con literal A como la sobresaliente estudiante que era.

En septiembre de 2021 Maryelin había consignado ante la directiva del plantel la asignación de cupo, requisito exigido para poder retirar a la niña del plantel.

Ya en Maracaibo, en el barrio Felipe Pirela, parroquia Eugenio Bustamante, sabían que ambas regresarían.

Victoria Valentina y su madre Maryelin Carolina vivían en Coro, se regresaron a Maracaibo y migraban a EE UU cuando la tragedia.

Se iría a estudiar a Maracaibo

Una constancia del 13 de septiembre suscrita por la profesora Morela Suárez indicaba que la niña tenía el cupo asegurado en la unidad educativa San Leonardo Murialdo en el estado Zulia. El plantel está ubicado en el barrio Felipe Pirela. No obstante, iniciaría clases en el segundo lapso.

Maryelin espero también hasta diciembre para renunciar, después de haber encontrado un lugar para ejercer la docencia.

La espera en la venta de la casa demoró el viaje a Maracaibo que finalmente realizaron en diciembre, según cuentan vecinos.

«Ahora que usted es mi maestra verdadera, tengo que irme», le dijo con nostalgia Victoria a Digna Rodríguez.

Ambas tuvieron la dicha de verse de nuevo en la casa de la maestra donde la niña iba a sus tareas dirigidas de cuatro a seis de la tarde.

Esa vez Victoria olvidó una chaqueta rosada que la maestra tuvo a bien regresársela.

«Guárdemela maestra, en algún momento regresaré para que me siga dando clases», le dijo la pequeña.

Diciembre de despedida

Maryelin y Victoria se marcharon en diciembre. Su partida dejó consternados a docentes y directivos del Ceis y la escuela Las Eugenias. No menos a los compañeritos.

Todos al fin de cuentas les auguraron éxitos y felicidad. Madre e hija se habían caracterizado por estar siempre justas, en casa, en la escuela y donde quiera que fueran, en fotos. Maryelin también era coqueta y divertida.

Huían de la crisis venezolana

«Estoy sola con mi hija, la situación económica no está buena. Buscaré otro trabajo que nos permita una mejor calidad de vida», le dijo Maryelin a una compañera.

En diciembre y hace unas semanas, previo al día del educador, ella escribió para felicitarles. Las maestras que tenían un grupo, intentaron responderle, pero no tuvieron éxito.

Desenlace fatal

La tarde noche de este martes, la noticia de la muerte de Victoria Valentina género conmoción internacional y nacional.

Madre e hija intentaban llegar de México a Estados Unidos, pero al momento de cruzar el río Bravo, la corriente las separó para siempre.

Tragedia en el río Bravo

En el intento de alcanzar el «sueño americano», la niña murió ahogada según reportaron autoridades de migración y patrulla fronteriza.

El hecho ocurrió en el sector conocido como Granjas del Valle, municipio Acuña, estado de Coahuila. A la hora de su muerte Victoria vestía chamarra roja, pantalón azul de mezclilla y calcetas blancas.

Hondo pesar causó la muerte de la pequeña Victoria, además de mayor incertidumbre porque las docentes de Coro desconocen si Maryelin alcanzó cruzar hacia Estados Unidos o quedó varada en México.

Con un nudo en la garganta y a pesar de los ojos inundados de llanto, Digna Rodríguez dictó clases a sus alumnos.

Lo hizo solloza, con la nostalgia acuestas y consciente de que Victoria ya no volverá como había prometido algún día. Le quedaron de recuerdo las vivencias, lo que le enseñó, el cariño que le brindó, y la chaqueta rosada.

El gobierno de México emitió el Boletín 016/2022 según el cual, el Grupo Beta del Instituto Nacional de Migración recuperó el cadáver de la niña extranjera.

«Tras la búsqueda en aerobote se localizó sin signos vitales; ante ello la trasladaron a la orilla, en territorio mexicano».

El INM lamentó lo sucedido a la niña y refrendó su compromiso por salvaguardar las personas en el contexto de movilidad, esto es menoscabo de su condición social, económica. Más aún, si quienes forman parte de los grupos vulnerables son niños, niñas y adolescentes.

Victoria Valentina Lugo Mayor era única hija. Nació el 5 de junio de 2014, un día antes de su madre Maryelin Carolina cumplir 29 años de vida.

A Maryelin se le había hecho difícil ser madre, así que el nacimiento de Victoria resultó el mejor regalo de su vida. El padre de la niña, José Humberto Lugo, es de La Vela, municipio Colina del estado Falcón.

Una más a la lista trágica

El canal Telesur indicó en diciembre que la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de las Naciones Unidas registraba al menos 650 migrantes muertos durante el 2021. Estas muertes se produjeron en su intento por cruzar la frontera entre México y Estados Unidos.

Para la agencia de la ONU, la cifra de migrantes muertos es la peor registrada desde que se comenzó a contabilizar las muertes en este paso fronterizo en el 2014. En 7 años se han registrado más de 5.700.

 

Por Agencia