sábado, noviembre 23

NBA abre pesquisa por polémico reportaje sobre dueño de Suns

La NBA ha pedido a un bufete de abogados que abra una investigación a los Suns de Phoenix luego que un reportaje publicado el jueves detalló acusaciones que apuntan que Robert Sarver, en sus 17 años como propietario del equipo, ha tenido un historial de incidentes racistas, misóginos y hostiles.

ESPN señaló que había conversado con decenas de empleados y exempleados del equipo para elaborar el contenido. De ellos, algunos narraron detalles sobre la presunta conducta inapropiada de Sarver.

La mayoría de las aseveraciones contra el empresario provienen de fuentes anónimas pero algunas están identificadas.

En el reportaje de ESPN, Sarver negó o refutó la mayoría de las aseveraciones en su contra mediante su equipo de abogados. A través de un extenso comunicado emitido el jueves por la tarde, los Suns rechazaron enérgicamente lo dicho en el reportaje.

Me complacería totalmente una investigación imparcial de la NBA que podría ser nuestra única manera de limpiar mi nombre y la reputación de una organización de la que estoy muy, muy orgulloso”, afirmó Sarver en un comunicado difundido el jueves a través de su equipo jurídico.

A Sarver se le cumplirá su deseo. La NBA emitió su propio comunicado en que el vicepresidente ejecutivo de comunicaciones de la liga, Mike Bass, subrayó que las acusaciones son “extremadamente serias” y por ello se ha solicitado que el bufete de abogados Wachtell Lipton “inicie una investigación exhaustiva”.

La NBA y la WNBA seguirán comprometidas a ofrecer un lugar de trabajo respetable e inclusivo para todos los empleados”, afirmó Bass. “Una vez que la investigación haya terminado, sus resultados ofrecerán las bases para cualquier acción de la liga”.

Entre las acusaciones: el exentrenador de los Suns, Earl Watson, dijo que Sarver se había molestado de que el alero Draymond Green utilizara la palabra “negro” durante un partido en 2016 y que el dueño hiciera lo mismo varias veces cuando manifestó su disgusto. Watson señaló que había indicado a Sarver que no debía utilizar la palabra.

Watson dirigió a los Suns durante tres campañas, algunas incompletas, hasta que lo despidieron después de tres partidos en la temporada 2017-2018.

Sarver dijo en su comunicado que Watson era “obviamente una fuente nada creíble”.

Aunque esta historia está llena de imprecisiones y es engañosa, tanto que apenas sé dónde comenzar, permítanme aclarar: la palabra con “n” no forma parte de mi vocabulario”, declaró Sarver. “Jamás he llamado a nadie, ni a ningún grupo de personas con esa palabra, ni me he referido a nadie ni a ningún grupo de personas de esa manera, ni en forma oral ni escrita. No utilizo esa palabra”.

Watson emitió su propio comunicado a través de los Raptors de Toronto, equipo del que es en la actualidad asistente de entrenador.

No estoy interesado en enfrascarme en una guerra de declaraciones”, dijo Watson. “En vez de ello, quiero aplaudir el valor de los numerosos jugadores, ejecutivos y empleados por combatir con su verdad los ambientes tóxicos de insensibilidad racial, hostigamiento sexual y microagresiones”.

El básquetbol y 17 años en la NBA me han otorgado el privilegio económico para decir la verdad, pero no podemos olvidar a quienes deben permanecer callados por el temor de perder sus empleos”, añadió Watson.

En el reportaje también se detalla cómo Sarver mostró a varios empleados una fotografía de su esposa con un bikini de los Suns. Según el contenido, más de una docena de empleados también señalaron que Sarver tenía un historia de “hacer comentarios libidinosos en las reuniones con todo el personal”.

Los Suns recibieron a los Rockets de Houston el jueves por la noche y el coach de Phoenix, Monty Williams abordó el tema del reportaje antes del partido. Williams —quien es de raza negra— dijo que no ha hablado con Sarver desde que el artículo de ESPN fue publicado y que de haber escuchado al propietario del equipo decir algunas de las cosas por las que se le acusa en el reportaje “yo no estaría aquí sentado”.

Mi reacción es que hay mucho que procesar”, resaltó Williams. “Hay muchas cosas ahí y para mí sigue sin estar claro, en cuanto a los hechos. Como alguien que se hace cargo del programa, pienso que todas estas cosas que se dicen son graves en su naturaleza. Estas acusaciones son delicadas —y con ello me quedo corto”.

Williams agregó que él comprendería si alguno de sus jugadores se negara a jugar el jueves debido a la situación, pero comentó que ninguno de ellos había manifestado ese deseo hasta el momento.

El base de los Suns, Devin Booker —que es el jugador del plantel actual que más tiempo lleva con el equipo en su séptima temporada— es el único de ellos que jugó para Watson.

Booker indicó que Watson era una persona creíble pero dijo que no estaba enterado sobre la conversación entre Watson y Sarver hasta que la leyó en el reportaje de ESPN.

El sindicato de jugadores de la NBA señaló el jueves en un comunicado que “seguimos revisando las acusaciones en el reportaje de hoy de ESPN. Consideramos que estas acusaciones son serias y aplaudimos la decisión de la liga de realizar una investigación. No ofreceremos más declaraciones hasta que el proceso haya concluido”.

En el reportaje de ESPN, el portavoz de la liga Mike Bass señaló que la NBA no ha “recibido queja alguna de mala conducta en la organización de los Suns a través de nuestros procesos, entre ellos nuestro número telefónico confidencial para lugares de trabajo u otra correspondencia”.

Sarver es propietario de los Suns desde 2004. El empresario de 59 años también es dueño del equipo Mercury de Phoenix de la liga femenina de la NBA.

Los Suns vienen de una de sus temporadas más exitosas de su historia, tras llegar a la final de la NBA con sus estrellas Devin Booker, Chris Paul y Deandre Ayton antes de perder en seis partidos frente a los Bucks de Milwaukee. Los Suns también llegaron a la final de 1976 y 1993 pero nunca han ganado un campeonato.

Por Agencia