El home office es una modalidad de trabajo que llegó para quedarse, sin embargo, no todas las personas han podido responder con la misma efectividad y calidad de su trabajo. Estar en un nuevo ambiente como el de tu casa, compartiendo el cuidado de los niños, la rutina del hogar, más las exigencias de trabajo, todos estos son nuevos distractores que inciden en la concentración.
La falta de concentración es uno de los factores que más afecta la productividad diaria, especialmente, si estás trabajando desde el hogar.
En estas circunstancias, distraerse puede ser fácil, por eso hoy comparto consejos que pueden ayudarte a mejorar tu concentración y productividad, mientras trabajas en casa:
· Adecúa un espacio de trabajo. La modalidad de home office te da la libertad para trabajar desde tu cama, desde la cocina o un cómodo sillón, sin embargo, esas condiciones no son las idóneas para lograr concentrarte debidamente.
Por eso, la recomendación es buscar una mesa o escritorio, una silla cómoda para trabajar, dispón allí todos tus implementos de trabajo. Ten presente que al delimitar un área para el trabajo, le estás enviando la indicación a tu cerebro de que estás activo, esto te facilitará enfocarte en el trabajo.
· Vístete para trabajar. ¿Sabías que estudios como el desarrollado por el Journal of Experimental Social Pschycology indican que la ropa tiene un significado simbólico y condiciona la conducta?, en otras palabras, cuando vistes de cierta manera tiendes a adoptar comportamientos relacionados a lo que llevas puesto. Así que, deja el pijama solo para cuando te dispongas a dormir o quedarte relajado en tu cama.
· Define tus objetivos diarios. Tómate los primeros minutos de la jornada para plasmar en un papel o tu agenda, el plan del día, ya sea hacer seguimiento a pendientes, una lista de llamadas telefónicas, desarrollar propuestas, monitorizar, contactar o prospectar.
· Planifica tus actividades de acuerdo a su importancia. Cuando definas tu plan de trabajo, resalta, ya sea por colores, con marcadores o post it, las prioridades. Esto te ayudará a darle orden a tus actividades, por ejemplo, qué debes ejecutar en primer lugar, y a partir de allí, lo que sigue en importancia y apremiante.
· Haz pequeñas pausas para descansar. Recuerda que la atención prolongada a una sola actividad afecta el desempeño y te sobrecarga de estrés. Cuando tomas pausas entre meta y meta, puedes recargar tus energías y refrescar las ideas.
Esta es una de las ventajas de trabajar desde casa, pues, puedes decidir cómo tomar tus descansos, sugiero para ello, dar una corta caminata, comer una fruta, hidratarte, leer un capítulo de ese best seller que estás leyendo, ver cortos videos, o sentarte unos minutos en el jardín a escuchar música. Así, logras que tu mente descanse y al retornar a tu labor, te aseguro, lograrás concentrarte con mayor facilidad.
· Silencia tu teléfono, cierra el correo electrónico y las redes sociales. El móvil es una distracción y una tentación a la hora de trabajar desde la casa. Asume con disciplina el control del tiempo que dispones para las redes sociales, para hablar con tus amigos y revisar tus correos.
Mientras te encuentres en modo jornada de trabajo, el uso de tu teléfono inteligente debe ser para ese fin, bien sea conectarte con tu equipo, con los clientes, con los proveedores.
· Respeta tu horario de alimentación. En tu planificación diaria, procura mentalizar períodos de dos horas de trabajo por cortos lapsos de descanso, salvo el horario que dispondrás para almorzar. Ten en cuenta que un estómago muy lleno, puede afectar la agudeza mental.
De allí, que recomiendo no solo comer a la hora, sino hacerlo bien y saludablemente. Cuando ingieres grasas y carbohidratos, el sistema digestivo gasta mucha energía en procesarlo, ese procesamiento hace que se disminuya el oxígeno que va a tu cerebro.
Una manera saludable es comer frutas o refrigerios ligeros entre comidas, esto te ayudará a controlar el hambre, y, por ende, mantener tu concentración en el trabajo.
· Recompénsate por cada meta lograda. Una forma eficaz para mantenerte motivado en tu labor diaria desde casa es celebrar y compensarte por cada meta lograda. Eso es automotivación, sea dándote un gusto culinario, rentar una película que siempre has querido ver, bailar en tu sala, sentirte bien contigo mismo, o cualquier detalle o gesto que te haga feliz y sentirte pleno. Y, sobre todo, intenta disfrutar lo que haces.
Como ves, son sencillas claves que te ayudarán a mantener la concentración y la productividad a la hora de trabajar desde tu casa sin perder la motivación.
Ahora, me gustaría saber cómo ha sido tu experiencia trabajando bajo esta modalidad, y si consideras útiles estas recomendaciones.
Por Jenny La Rotta