Cuatro personas, incluido un bebé, murieron este domingo en un extraño tiroteo en el condado de Polk, en el oeste de Florida, cuando un hombre que dijo ser “un superviviente” disparó contra varias viviendas, informaron las autoridades estadounidenses.
El alguacil del condado Polk, Grady Judd, dijo que el sospechoso, que fue detenido tras resultar herido en las confrontación con las autoridades, estaba vestido con camuflaje, con un chaleco antibalas y dijo que había ido para un “tiroteo”, reseñó EFE.
El ataque ocurrió en la madrugada del domingo cuando el sospechoso, que no ha sido identificado, disparó contra varias casas en una misma área de la ciudad de Lakeland, detalló el aguacil.
En el hecho también resultó herida con múltiples disparos una niña de 11 años que está siendo tratada en el hospital Tampa General, según las autoridades.
La oficina del alguacil recibió varias llamadas sobre un tirador activo alrededor de las 4.30 de la madrugada (1.30 GMT).
Los agentes del alguacil, la policía de Lakeland y unidades de élite de la policía estadounidense (SWAT) respondieron al área cerca de Fulton Greed Road, en Lakeland.
“Los agentes fueron atacados cuando llegaron cerca de una residencia”, explicó el alguacil Judd.
Detalló que dispararon unas 100 rondas entre el sospechoso y los agentes. El sospechoso, que se rindió tras recibir un disparo, fue llevado al Lakeland Regional Health Medical Center para recibir tratamiento.
Judd dijo que ocurrieron dos tiroteos separados “en poco tiempo” antes de que el sospechoso se rindiera.
Por Agencia