De la derrota presidencial al banquillo de los acusados ante la justicia. En Lima se abrió la audiencia inicial del juicio en contra de Keiko Fujimori en el Caso Odebrecht, en el que un juez debe decidir si admite las pruebas y testigos de la fiscalía contra la excandidata presidencial y otros 40 acusados.
Entre otros imputados aparece el esposo de la líder del derechista Fuerza Popular, el estadounidense Mark Vito. El proceso judicial se encontraba suspendido mientras Fujimori llevaba su tercera campaña electoral. El fiscal José Domingo Pérez presentó ese mes los tres cargos contra los acusados.
A todos ellos se les responsabiliza por blanqueo de capitales, organización criminal y obstrucción a la justicia. La fiscalía los considera responsables de recibir 1,2 millones de dólares de la constructora Odebrecht. El dinero se habría utilizado en las campañas electorales de 2011 y 2016.
El ministerio público del país sudamericano sostuvo que el partido de Fujimori no declaró los fondos. El fiscal Pérez pidió 30 años y diez meses de prisión para la hija del exdictador Alberto Fujimori y 22 años para su marido. La audiencia de “control de la acusación” puede durar más de un año.
La República informa que el código procesal penal de Perú no establece un plazo para esa fase antes del juicio público. El fiscal superior Rafael Vela explicó que “el problema es del Poder Judicial que no tiene dedicación exclusiva al caso”.
Fujimori durante su tercera derrota electoral a la presidencia en 2021
Por Agencia