El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, instó este domingo a sus partidarios a salir a las calles listos para el «combate», como respuesta a las protestas pacíficas espontáneas surgidas este domingo contra su Gobierno en diferentes puntos del país.
«La orden de combate está dada, a la calle los revolucionarios», exhortó el mandatario en una comparecencia televisiva especial.
Las protestas se han producido en diferentes localidades del país caribeño, como San Antonio de Los Baños, Güira de Melena y Alquízar en la provincia occidental de Artemisa, Palma Soriano en la oriental Santiago de Cuba, Cienfuegos y también en La Habana.
A su regreso de San Antonio de Los Baños, Díaz-Canel calificó de «provocaciones de la contrarrevolución» las protestas antigubernamentales que reclamaron «libertad» y «¡abajo la dictadura!», en momentos en que el país padece una severa crisis económica y sanitaria.
«No vamos a permitir que nadie defienda un plan anexionista», sentenció el gobernante, al reiterar que tampoco «entregaremos la soberanía, ni la libertad» y para ello «estamos dispuestos a dar la vida».
Al comienzo de su intervención, reconoció la difícil situación económica agravada, a su juicio, por el endurecimiento del embargo y las sanciones económicas aplicadas por EEUU bajo el mandato del expresidente Donald Trump «para provocar un estallido social masivo» en la isla caribeña.
Mencionó que también se produjo una «feroz campaña mediática» con el objetivo de «fracturar la unidad entre el Partido (Comunista, único legal), y el pueblo».
El presidente criticó la campaña impulsada en las redes sociales desde hace varios días en demanda de ayuda humanitaria ante la difícil situación sanitaria en varias regiones del país, especialmente Matanzas (occidente).
Usó calificativos como «cobarde, oportunista y perversa» para referirse a esta iniciativa ciudadana a la que se sumaron varios artistas internacionales y cobró auge en las redes sociales.
«Esos que siempre han estado apoyando el bloqueo (embargo) y se han servido como lacayos empiezan a aparecer con doctrinas de intervención humanitaria, de corredor humanitario para fortalecer el criterio de que el Gobierno cubano no es capaz de resolver», señaló.
El también líder del Partido Comunista Cubano cuestionó que en otros países que pasaron por un «pico pandémico», la prensa internacional no pidió una «intervención humanitaria».
En su mensaje, Díaz-Canel justificó también que Cuba no tenía dinero para comprar las vacunas contra el COVID-19 en el mercado internacional y por ello decidió producirlas.
«¡Qué dictadura más extraña!, que trata de buscar bienestar para todos», ironizó al comentar sobre el proceso de inmunización en marcha en el país a través de ensayos clínicos y estudios de intervención sanitaria, detalla EFE.
Mientras Díaz-Canel hablaba hoy, cientos de cubanos salían a las calles de La Habana al grito de «libertad» en manifestaciones pacíficas, que fueron interceptadas por las fuerzas de seguridad y brigadas de partidarios del Gobierno, produciéndose enfrentamientos violentos y arrestos.
Por: Agencias / Foto: Cortesía