El príncipe Andrés, hermano del rey británico Carlos III, tendrá que afrontar él mismo los gastos de mantenimiento y seguridad de la mansión de Windsor donde reside o bien mudarse, según revela este lunes la BBC.
El canal de televisión británico señala que los subsidios de la familia real que mantienen este alojamiento de 30 habitaciones ubicado en Windsor Great Park no seguirán estando disponibles indefinidamente, reseñó EFE.
Si bien Andrés tiene contrato con la Corona para poder vivir en la residencia hasta 2078, el príncipe tendrá que financiar él mismo los costosos gastos derivados de la propiedad, en la que también reside su exesposa Sarah Ferguson, para poder quedarse allí.
La relación del príncipe Andrés con Jeffrey Epstein
El príncipe Andrés cayó en desgracia por su amistad con el malogrado millonario estadounidense y convicto agresor sexual Jeffrey Epstein. En 2022, la estadounidense Virginia Guiffre lo acusó de haberla agredido sexualmente tres veces en 2001, cuando ella tenía 17 años.
La BBC sugiere que si el príncipe tuviera que mudarse a una vivienda más pequeña como Frogmore Cottage -empleada en su día por los duques de Sussex-, la propiedad podría emplearse como activo financiero de la Corona.
Andrés se mudó a la vivienda en 2002, un año después de la muerte de su inquilino previo, Isabel la Reina Madre, progenitora de Isabel II.
La vivienda precisaba de una renovación que asumió el príncipe al pagar un coste inicial de más de 7,5 millones de libras (8,8 millones de euros) además de un pago único de 1 millón de libras (1,18 millones de euros) a sus caseros, el Crown Estate -entidad independiente que gestiona el patrimonio de la realeza en nombre del Estado británico-.
La BBC indica que si el hermano del rey puede afrontar los elevados gastos del mantenimiento y seguridad del edificio, podría quedarse pero que de no ser así, tendrá que mudarse a otro lugar que pueda sufragar.
Por Agencia