Jeanette Rincón, representante de la Red Clamor Venezuela, advirtió que los migrantes venezolanos se están trasladando hacia otros países en el marco de una “frontera caliente e invisibilizada” y puso como ejemplo la salida desde el estado Sucre hasta Trinidad y Tobago, donde existe una situación de inseguridad y desprotección tanto como la que ocurre por la Selva del Darién.
“No sabemos cuándo sale una embarcación, si llega al otro destino o naufraga en la ruta”, dijo en el programa Háblame Bajito de Radio Fe y Alegría Noticias
“Es más intenso, porque también para dar respuesta es más difícil justamente por la invisibilización que le da un margen de libertad de acción a la delincuencia y al crimen organizado, redes de trata, de todo”, agregó Rincón.
Afirmó que, en comparación al año 2015, “ahora la gente que emigra ahora posee menos estudios y menos posibilidades económicas”.
En ese sentido, caracterizó las olas migratorias de Venezuela de la siguiente manera: En un principio salió un grupo de personas que eran los que más recursos tenían, que tomaron la decisión por la sospecha de que la situación del país se iba a complicar y quizás veían en riesgo sus empresas y propiedades.
Luego salieron personas que quizás trabajaban en ocupaciones informales que son lo que mueven el país: los técnicos, los carpinteros o plomeros, entre otros. Después le siguieron toda la ola de profesionales.
“Antes salían hombres. Ahora hay presencia de mujeres y de niños, niñas y adolescentes que van solos”, alertó Rincón.
Datos alarmantes
Dijo que se han hecho sondeos que revelan que 1 de 4 personas van con una necesidad humanitaria y que al menos un 90% de la población migrante busca la integración socioeconómica a través de un trabajo en otro país.
Asimismo, un 65% tiene una necesidad de protección, lo cual incluye la documentación, porque salen del país sin papeles lo que complejiza el trámite de regulación en el nuevo país.
De los niños y niñas que llegan a los países de acogida, un 20 % llega y no tiene la oportunidad para estudiar y el 70% va con problemas de seguridad alimentaria.
Remigración
Rincón mencionó que la movilidad de migrantes venezolanos en esta primera parte del 2024 superó el 20 % en comparación a los años anteriores, explicando que dicho porcentaje incluye a la población venezolana que está en otros países, como Perú o Ecuador, y decide ir hacia el norte.
“El asunto es que el venezolano está remigrando”, expresó, agregando que “dependiendo de cómo empiezan a moverse las cosas en el segundo semestre del año se espera una ola migratoria”.
Rincón aseguró que las personas siguen saliendo en busca de un trabajo y oportunidad para prosperar, además de un estilo de vida más seguro, pero también está el tema de la reunificación familiar.
Propuesta de fraternidad universal de Cristo
“Como lo ha dicho el papa Francisco: la gente tiene derecho a migrar, pero libremente, no migrar por obligación porque no tengo comida, empleo, seguridad jurídica o porque me siento perseguido por mi forma de pensar”, remarcó.
La Red Clamor es la red eclesial para la atención de personas migrantes, desplazadas, refugiados y víctimas de trata en latinoamérica, que depende del programa de redes pastorales y está presente en 16 países, entre ellos, Venezuela.
Según Rincón, en el marco de la migración venezolana, la Iglesia comenzó a ver la necesidad de atender esta situación, “demandando el compromiso de seguir esa propuesta de fraternidad universal de Cristo”.
Por Agencia.