“Acércate. Sujétate de la barandilla. No te sueltes… Ahora abre los ojos”. “Estoy volando, ¡Jack!”. La escena de Titanic (James Cameron, 1997) en la que Jack invita a Rose a ver la última puesta de sol de su vida desde lo alto de la barandilla del transatlántico más famoso del mundo, ha quedado marcada en la memoria colectiva. Ahora, la encargada de encarnar a la joven aristócrata inglesa, Kate Winslet, ha revelado este miércoles 12 de junio, en una entrevista con Vanity Fair, que la grabación no fue tan mágica como el resultado final.
“Qué pesadilla fue grabar esto”, es, su primera reacción al ver la escena en una televisión propia del siglo pasado, “tuvimos que grabarla al menos cuatro veces porque James (refiriéndose al director del filme) estaba empeñado en alcanzar una luz muy específica. Obviamente”, dice en tono irónico. “No me extraña de todas las chicas jóvenes quisieran besar a Leonardo”, aunque al recordarlo confiesa que “no fue todo como parece”, dijo.
La actriz que en la escena aparece con un vestido de época bromea: “Miro la escena y me pregunto cómo pude respirar con ese corsé tan ajustado”. Una vez subida a la barandilla, donde ambos tararean Ven Josephine asciende en mi máquina voladora (1910), Winslet confiesa que fue de lo más molesto. “Mis tetas estaban prácticamente a la altura de mi barbilla”, además recuerda mientras ríe que sus rodillas se golpeaban constantemente con la barandilla, reseñó El País.
“Lo que nadie entiende es por qué Leo aparece con una piel tan natural, porque llevaba mucho maquillaje”. La ganadora de un Oscar por The Reader (2009) recuerda que durante la grabación fue la responsable de su propio maquillaje, pues la escena se grabó en un lugar inaccesible para el equipo encargado de ello. Pero también, se encargó de mantener el de su coprotagonista, que, según cuenta, iba embadurnado en bronceador. “Tenía que esconder su maquillaje y el mío en esta parte y en esta”, cuenta mientras se señala la zona de su escote. La escena se grabó en varias tomas, y cada vez que se empezaba de nuevo, la actriz se encargaba de maquillarse y maquillarlo: “Entre tomas tenía básicamente que rehacer nuestro maquillaje. Pero la verdad que fue muy divertido eso de estar cubiertos del maquillaje del otro. Terminaba luciendo como si hubiera estado chupando una barra de chocolate con caramelo. ¡Oh Dios, un desastre!”.
Para Winslet, Titanic siempre será una de sus películas más especiales: “Me siento muy orgullosa de ella, porque siento que es de esas películas que sigue en lo más alto”. “Otras generaciones enteras de personas están descubriendo la película o viéndola por primera vez, y hay algo extraordinario en eso”, concluye en su entrevista. El filme se hizo con 11 estatuillas en los premios Oscar, pero no la catapultó a la fama. Kate Winslet ya se había hecho con un lugar prestigioso en el mundo de la interpretación gracias a su papel en Sentido y Sensibilidad (1995). Aun así, ella misma ha confesado en múltiples ocasiones que no fue fácil conseguir interpretar a Rose DeWitt Bukater en Titanic. Ha sido este 2024, en una entrevista con la revista Variety, cuando ha detallado que presionó a su director para conseguir el papel: “Incluso me envió una sola rosa y me dijo: ‘Tengo que ser tu rosa’”, contó Cameron.
Por Agencia