Carlos Mavárez Viloria, residente del albergue para migrantes Standard Club en el centro de Chicago, ha sido arrestado diez veces desde que llegó a la capital de los vientos en el verano pasado, según registros policiales y judiciales.
Viloria fue liberado constantemente de la custodia después de cada arresto, pero eso terminó con el décimo caso, su primer delito grave, y actualmente vive en la cárcel del condado de Cook.
Su primer arresto se produjo el 12 de julio, cuando fue acusado de robar 10 gorras de las Grandes Ligas de Béisbol, relojes, una mochila y comida, por un valor total de 193 dólares, de Walmart en Evergreen Park.
Un juez emitió una orden de arresto en su contra cuando no compareció ante el tribunal al mes siguiente. Pero no estuvo prófugo por mucho tiempo. Al día siguiente, la policía de Chicago lo arrestó después de que la seguridad de Macy’s, 111 South State, afirmara que intentó robar camisetas por valor de 158 dólares.
Al mes siguiente, fue detenido por presunta posesión de una pipa de crack en el Loop. Los fiscales retiraron los cargos, pero un juez ordenó a los funcionarios que destruyeran la pipa de crack, según muestran los registros.
Recibió siete días por el caso de Walmart, pero los fiscales retiraron los otros dos asuntos.
El 24 de noviembre, fue arrestado por hurto y posesión de narcóticos en Nordstrom Rack, 24 North State. Los fiscales retiraron esos cargos menos de tres semanas después.
En febrero, la policía lo arrestó dos veces, la primera vez por presuntamente robar en el Walmart en Evergreen Park. Nunca se presentó en la corte, y desde el 3 de mayo se ha emitido una orden de arresto en su contra, según los registros judiciales.
Más tarde ese mes, la policía de Chicago arrestó a Viloria después de que un empleado de una tienda de conveniencia en el Loop informara que Viloria le apuntó con un arma y le dijo algo como: «Te dispararé«.
Los oficiales encontraron a Viloria dentro de un 7-Eleven diferente con un encendedor de cigarrillos en forma de pistola, según un informe de CPD. Los fiscales abandonaron el caso menos de un mes después.
El 12 de abril, los oficiales de policía de Chicago golpearon a Viloria después de que supuestamente huyó de ellos dos veces y se resistió al arresto cuando intentaron detenerlo por robar dos Four Loko de 23.5 onzas de una tienda de conveniencia del centro. El caso aún está pendiente.
Su octavo arresto se produjo el 19 de abril, cuando un guardia de seguridad le dijo que no se le permitía entrar a Walgreens, 2 North State, y entró de todos modos, según un informe del CPD. Los fiscales abandonaron el caso el 14 de mayo.
¿Arresto número nueve? Eso fue el 27 de abril en el Parque Pritzker. La policía dijo que estaba vendiendo ropa de hombre sin permiso.
«Le compré la ropa a otra persona y la estoy vendiendo para ganar dinero para mis hijos«, supuestamente les dijo a los oficiales. Los fiscales abandonaron el caso al día siguiente.
Eso nos lleva al arresto número diez. Ocurrió el 15 de mayo en el Parque Pritzker. Los agentes del alguacil del condado de Cook lo arrestaron por varios casos de hurto en tiendas presentados por TJ Maxx, 11 North State, según los registros judiciales.
Viloria empujó, forcejeó y cayó al suelo con uno de los agentes. Un segundo agente sufrió lesiones en la mano y el brazo, según el informe.
Además del delito grave de agresión agravada a un oficial de paz, Viloria fue acusado de resistencia, conducta imprudente y robo de mercancía por valor de $ 450 de TJ Maxx, incluida ropa de hombre y una maleta, según los documentos judiciales. Los presuntos robos ocurrieron el 9 de abril, el 25 de abril, el 30 de abril y el 7 de mayo.
El juez Ankur Srivastava emitió un fallo que permite la liberación de Viloria bajo monitoreo electrónico. Hasta ahora, sin embargo, eso no ha sucedido.
Por: Agencia