El alcalde de Maracaibo, Rafael Ramírez Colina, informó este lunes 29 de abril que durante este fin de semana se realizó el tercer abordaje a la niñez que está en las calles de la ciudad, además agregó que en esta oportunidad se atendieron a 39 niños y adolescentes.
“Este fin de semana atendimos 39 niños y adolescentes, dos jóvenes, siete niñas, siete niños, dos jóvenes, adolescentes femeninas tres, adolescentes masculinos 20, jóvenes adultos dos familias atendidas 29 porque esos operativos arrancan a las 11.00 de la noche (viernes) y terminan a las 5.00 de todas las madrugadas (sábado)”, señaló Ramírez.
El alcalde agregó que en este operativo hicieron 28 visitas domiciliarias, 27 informes técnicos – sociales, los cuales permiten determinar y establecer de cada una de las familias a las cuales pertenecen los niños y muchachos.
“Al menos cinco de estos casos son reincidentes de los dos operativos anteriores que los encontramos en la mendicidad y el trabajo forzoso. A veces uno se encuentra niños que salen eventualmente, pero hay otros que están enviando (a la calle) con regularidad”, detalló.
El jefe del ejecutivo municipal recordó que el primero de estos abordajes con el Consejo Municipal del Niño, Niña y Adolescente lo hicieron en diciembre y en ese momento pensaron que los casos en su mayoría serían porque los afectados no tendrían casa, sin embargo, no ocurrió así, encontraron niños con familias en viviendas “bien estructuradas”, aunque con necesidades, pero con padres que no asumen su responsabilidad.
Aseguró que la importancia estos datos radica en el esfuerzo para visibilizar este tema que no solo le concierne a la municipalidad sino a la ciudad en pleno.
“Estamos ahora en la estructuración de la próxima casa abrigo que tenga la Alcaldía, mientras vamos buscándoles la solución definitiva, la cual pasa por mejorar la economía, por padres más responsables, un trabajo social mucho más importante, pero por ahora nuestra intención es sacar del peligro a esos niños. Cuando uno siente que está haciendo algo porque los ayuda o les da de comer en un determinado punto, a lo mejor está resolviendo un problema, pero la cuestión de fondo se sigue agravando porque es también una suerte de trabajo forzoso o situación de mendicidad producida por los adultos”, expuso Ramírez.
Texto y fotos: José Manuel Sánchez