Solo uno por ciento de la población tiene acceso a financiamiento bancario en Venezuela, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi 2023), un dato que marca un retroceso histórico frente al 22 por ciento con crédito disponible en 2015.
Igualmente, uno por ciento de la población cuenta con ahorros disponibles en cuentas bancarias o cajas de ahorro, un retroceso aún más grave en comparación con el 27 por ciento que disponía de estos mecanismos de apoyo en 2015, detalla Banca y Negocios.
El economista y presidente de la Academia Nacional de Ciencias Económicas (ANCE), Leonardo Vera, señala que «el crédito sirve de palanca y de apoyo a la movilidad social. Un crédito educativo, de vivienda y/o de vehículo puede marcar una sustantiva diferencia en el campo de las oportunidades en el transitar o ciclo de vida personal».
En un hilo en la red social X, Vera subraya que «por otra parte, frente a la volatilidad de los ingresos y el riesgo de perder transitoriamente esa fuente (sea por despido, quiebra empresarial, o movilidad en el trabajo), el crédito ayuda a mitigar los impactos sobre las familias».
La Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (ENCOVI 2023) arroja muchos mensajes, algunos particularmente dramáticos. Aquí uno especialmente importante.
Cuando en 2015, el 22% de los encuestados declaraban tener acceso al crédito, hoy sólo el 1% declara tal cosa.
Hilo 🧵 pic.twitter.com/aTe3ZjZmTO— Leonardo Vera (@LeonardoVera60) March 16, 2024
¿Por qué se destruyó el crédito?
Para Leonardo Vera, presidente de la ANCE, el mercado de crédito fue «destruido» por dos motivos fundamentales:
El economista señala como «problemas gravísimos», en primer lugar, al «pésimo manejo de las reservas internacionales, del mercado cambiario, de la brecha fiscal y de su financiamiento (puramente monetario), que nos llevó a un proceso de cuatro años de hiperinflación, reduciendo con ello el tamaño del sistema financiero y el potencial crediticio».
Y luego cuestionó «la idea de combatir la inflación, entre otras cosas, con el establecimiento de un encaje bancario confiscatorio (de 93% y luego 73%) sobre los depósitos, que dejó al sistema financiero sin recursos para intermediar».
«El crédito a las personas es un aspecto clave y esencial de la inclusión financiera, y la correlación positiva entre PIB per cápita e inclusión financiera ha sido descubierta por varios estudios recientes», señala Vera.
Por: Agencias / Foto: Cortesía