Mateo Pérez es el niño venezolano de seis años de edad, estudiante de primer grado oriundo del estado Táchira, que ha sido tendencia en redes sociales por sus clases de matemáticas en Internet.
En conversación con Adelita Sánchez para el programa Sin Mucho Protocolo, transmitido por Onda 91.5 FM La Superestación, confesó que le gustan las matemáticas por su enorme poder para contar, medir y pesar.
“Estoy enseñando a 17 mil personas, que es el número de mis seguidores en Instagram, a resolver diferentes operaciones matemáticas”, dijo.
A su vez, al pequeño le gusta el inglés y la geografía, sabe infinidad de cosas de los países del mundo, ubicación, banderas y algunos himnos. Sobre matemáticas ha aprendido sólo viendo vídeos a través de Internet con varios profesores, en su mayoría con ejercicios de primaria, secundaria y hasta de grado universitario.
Sus padres Luis Pérez y Naibeth Gutiérrez, destacaron el don de Mateo para ayudar a muchas personas mediante sus clases en línea.
“También toco piano y el cuatro, los jueves y viernes respectivamente”, comentó el niño de seis años de edad, quien además contó sobre los países más grandes y pequeños del mundo, lo que significa ser un país en clave y para qué sirve la geografía.
Mateo estudia primer grado en la Unidad Educativa Colegio Fundación Taller Escuela de Capacho Viejo, en el estado Táchira. También pertenece al Sistema Nacional de Coros y Orquestas de Venezuela.
“Hace unos meses lo diagnosticaron con autismo grado uno, lo que lo hace un niño increíble, amoroso, noble y con un coeficiente intelectual muy superior a la media. Como padres siempre se piensa en lo peor, pero en el caso de Mateo es beneficioso por la inteligencia que ha desarrollado”, destacó Naibeth.
Sus padres comentaron que el fuerte de su hijo es estar conectado en la búsqueda de información para educarse. Según su madre, desde los dos años Mateo desarrolló una enorme capacidad de aprendizaje.
El niño que reside en la ciudad de Capacho Viejo, en Táchira, ya dominaba las tablas de multiplicación y la división a los tres años.
A raíz de toda su inquietud y dominio de los números, dio el salto a las redes y junto a sus padres graba los vídeos donde resuelve las diferentes operaciones matemáticas.
Por Agencia.