A las 3:22 p.m llegó la marcha convocada por el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) para conmemorar 66 años del 23 de enero de 1958, a la avenida Universidad del centro de Caracas al encuentro con el presidente Nicolás Maduro, quien pronunció un discurso para los seguidores del chavismo.
Maduro, ataviado con una chaqueta de camuflaje verde oliva, volvió a mencionar las cinco conspiraciones, que aseguró, develaron los organismos de inteligencia militares y policiales durante 2023, todas, recalcó, con el objetivo de asesinarlo, reseñó Efecto Cocuyo.
Reiteró que todos los autores materiales de los planes conspirativos están capturados, presos, convictos y confesos.
«Soy un hombre de paz, he llamado al diálogo mil veces, creo en el diálogo, democracia y el entendimiento, jamás me he rendido frente al imperio, jamás traicionaré al pueblo, pero soy uno de ustedes y si algún día los fascistas me hicieran daño, algún atentado, dejo en manos de ustedes hacer lo que tengan que hacer para reponer la justicia y la paz de Venezuela, activen la furia bolivariana» exclamó eufórico.
Confirma que habrá comicios
Maduro volvió a culpar al imperialismo —en alusión a Estados Unidos, con cuyo gobierno negocia directamente para el levantamiento de sanciones— de los planes para derrocar a su gobierno.
Insistió que no solo querían asesinarlo a él, también al ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López y al gobernador de Táchira, Freddy Bernal.
«Oligarcas, fascistas, se arrepentirían por mil años los apellidos, amo la vida, al pueblo, a mi patria, pero estoy obligado a prepararlos a ustedes, porque cinco veces trataron de matarme, pero nada me va a detener, voy a seguir en la calle, y para que les arda, voy a seguir gobernando este país con el pueblo venezolano», advirtió.
Posteriormente aseguró que «llueva, truene o relampagueé», habrá elecciones presidenciales en Venezuela este año.
«Llueva truene o relampaguee el pueblo volverá a triunfar», sostuvo al terminar un discurso de una hora.
¿Dónde está Guaidó?
Con ironía, Maduro recordó los cinco años de la juramentación de Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela, por parte de la Asamblea Nacional (AN) de 2015 el 23 de enero de 2019, tras ser desconocidas las elecciones presidenciales de 2018.
«¡Que viva Juan Guaidó, mi presidente! (…) Les pregunto a los López, a la Machado, ¿Dónde está Guaidó y dónde estoy yo? ¿Son más fuertes? (…) A los apellidos les decimos, no te vistas que no vas» gritó.
Pidió a la militancia del Psuv a prepararse para lo que viene este año y a todo el país para que en unidad se trabaje por la recuperación económica y la paz.
En el acto oficial no faltó el empresario colombiano y presidente del Centro de Inversiones Productivas de Venezuela, Álex Saab, a quien Maduro nuevamente expuso ante la multitud como un inocente y torturado por Estados Unidos por garantizarle a los venezolanos comida y medicina.
Caravana desde el Táchira
Maduro hizo un pase a San Cristóbal, estado Táchira, donde Diosdado Cabello encabezó la movilización junto a Bernal.
«Les toca el contrataque de la furia bolivariana, van a ver que el cambur verde sí mancha, arranca la furia bolivariana hasta el 4 de febrero», decretó Cabello antes de iniciarse una caravana que recorrerá el occidente del país.
Está previsto que la caravana llegue a Caracas el 4 febrero para conmemorar 25 años del intento de golpe de Estado, comandando por Hugo Chávez contra el segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez.
Previamente, durante una caminata por la capital tachirense, Cabello aseguró que el chavismo madurismo se está preparando para ganar las elecciones no para perderlas y que la furia bolivariana se desatará contra «los traidores», a quienes advirtió, ya tiene identificados en Caracas, Táchira, Barinas y todo el país.
Por: Agencia