Más de 11.750 personas señaladas como “mineros ilegales” han sido expulsadas de la región amazónica de Venezuela desde el pasado 1 de julio, cuando comenzaron numerosos operativos de seguridad ejecutados por militares, informó este sábado el comandante de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), Domingo Hernández Lárez.
“Desde el 1 de julio hasta la fecha, han sido evacuados por la FANB, junto a los OSC (Órganos de Seguridad Ciudadana), más de 11.750 mineros ilegales que arbitrariamente se dedicaban a depredar la naturaleza y destruir los ecosistemas venezolanos”, dijo el funcionario en su cuenta en la red social X (antes Twitter).
El militar aseguró que estos mineros desalojados han sido “patrocinados por grupos delincuenciales y grupos tancol desde la población de Inírida, en Colombia”.
“Tancol” es un acrónimo inventado por el Gobierno colombiano que no hace referencia a ninguna banda en específico y que significa “terroristas armados narcotraficantes colombianos”.
Hernández Lárez añadió que en estos operativos de desalojo se han “incautado y destruido cuantiosos equipos de minería ilegal, equipos de comunicaciones, repuestos de maquinarias y vehículos, materiales de intendencia, uniformes militares, combustible, antenas satelitales, mangueras de alta presión, herramientas, toneladas de comida, y cientos de productos más”.
Calificó esta campaña de preservación del medioambiente, ordenada por el Ejecutivo venezolano, como “feroz”, y afirmó que mantendrán este trabajo para cuidar las reservas forestales, parques nacionales y cuencas hidrográficas, reseñó Últimas Noticias.
El militar acompañó la información de fotografías y videos en los que se observa el desalojo de estas personas a bordo de lanchas.
Según la institución militar, las personas abandonan el lugar “de manera voluntaria” y en acatamiento de una orden del presidente Nicolás Maduro, quien pidió a la FANB “limpiar” la Amazonía de la minería ilegal.
Una vez culminen estas expulsiones, el Ejecutivo pondrá en marcha un plan de reforestación en la Amazonía, especialmente para mitigar los daños causados por el uso de mercurio en estos territorios.
Por: Agencia