Las ricas monarquías del Golfo temían un repliegue de Estados Unidos de la región, pero Washington está aumentando su presencia militar frente a Irán, acusado de amenazar el tráfico marítimo con la incautación de buques petroleros en una zona estratégica.
«Existe un mayor riesgo para los marinos de la región debido a las incautaciones de buques que ha realizado Irán en el estrecho de Ormuz», dijo a AFP Timothy Hawkins, portavoz de la V flota de la armada estadounidense atracada en Baréin.
El estrecho de Ormuz, entre las costas de Irán y de los Emiratos Árabes Unidos es una zona estratégica para el comercio mundial por donde pasa un quinto del total del crudo mundial trasportado por vía marítima.
«Nuestra atención se centra en reforzar nuestra presencia al interior y en las proximidades de una importante vía de navegación», precisó Hawkins.
Según el ejército estadounidense, Irán incautó o intentó tomar el control de cerca de 20 buques con bandera extranjera en los dos últimos años.
Estados Unidos informó que impidió dos intentos de Irán de capturar buques petroleros en las costas de Omán a principios de julio.
La coalición naval liderada por Estados Unidos advirtió el sábado a los buques mercantes que se «alejaran lo más posible de las aguas territoriales iraníes».
Para Hawkins, se trata de una medida de «prudencia» después de los últimos incidentes.
A principios de agosto, la armada estadounidense anunció que desplegó tres mil efectivos en el mar Rojo y dos buques de guerra.
Reforzar sus alianzas
Los países del Golfo dependen de Estados Unidos para garantizar su seguridad y desde hace tiempo buscaron un compromiso más firme de Washington, especialmente después del aumento de estos incidentes a partir de 2019.
La prioridad dada por el presidente estadounidense, Joe Biden, a la región de Asia aumentó los temores de un repliegue estadounidense, lo que llevó a Arabia Saudita y a los Emiratos Árabes Unidos a reforzar sus vínculos con rivales de Washington, principalmente con China, pero incluso con Irán.
«Una de las principales ventajas de estos refuerzos adicionales es que permiten trabajar con socios marítimos clave, especialmente con Arabia Saudita», señaló Hawkins, que se negó a precisar si ésta fue una petición de los países del Golfo.
Este refuerzo de la presencia de Estados Unidos representa «un cambio de postura» que «probablemente apunta a reafirmar a los países del Golfo que Washington sigue comprometido con la seguridad de la región», estimó Dina Arakji, analista de la consultora Control Risks.
«La creciente hostilidad de Irán y la presencia de China en la región llamaron la atención de Washington», explicó la experta a AFP, afirmando que ahora Estados Unidos «busca reforzar sus alianzas».
Una disuasión más eficaz
En respuesta, Irán amenazó con incautar navíos estadounidenses.
Esta escalada de la tensión se produce después de que los esfuerzos para reactivar la negociación sobre el programa nuclear iraní fracasaran, con lo que Washington y Teherán siguen enfrentados por este tema.
«En ausencia de cualquier signo diplomático entre Estados Unidos e Irán, la única alternativa es una disuasión más eficaz», señaló Torbjorn Soltvedt, analista de la consultora Verisk Maplecroft.
Pero, este despliegue estadounidense «no va a ser suficiente para disipar las inquietudes crecientes en materia de seguridad en la región», explicó a AFP este experto.
Para él, si siguen los incidentes, «va a persistir la impresión de que Estados Unidos no hace lo suficiente para disuadir los ataques iraníes».
Por: Agencias / Foto: Cortesía