lunes, diciembre 23

La inmundicia arruina el Lago de Maracaibo

La desmedida localización de resto de petróleo, gran cantidad de basura, sobre todo plástico, aumento de algas cianófita en las orillas del Lago de Maracaibo, tanto del lado marabino como en la Costa Oriental del Lago, Mara, Bachaquero y todos los municipios que colindan el ecosistema, según los ambientalista tienen efectos tóxicos y venenosos para el ambiente lacustre, lo que se traduce como un macro problema, por lo que piden que se decrete una emergencia ambiental en el estuario.

«Hermoso Lago, hermosa fuente divina, lleno plenitud y transparencia», son las primeras palabras de la gaita de Gladys Vera, lanzada en 1999, donde Jesús Rizo y Jorge Luis Chacín plasman la incipiente contaminación de la reserva de agua dulce del estado. En este momento, muchos años después, los ambientalistas ven con preocupación como el daño es irreparable, afectando a todo un ecosistema existente en el Lago de Maracaibo.

Tradición y orgullo zuliano

El Lago de Maracaibo está lleno de historia y tradición para todos los zulianos, en el inmenso ecosistema lacustre hay historia y misticidad, un orgullo para todo aquel que haya nacido en esta tierra de gracia.

Se cuenta que hace 313 años recordando la gaita interpretada por la sempiterna Gladys Vera, «fueron los peces, junto a las olas, los que llevaron la tabla de Nuestra Santa Patrona», la sagrada reliquia de la Virgen del Rosario de Chqiuinquirá llegó por el Lago de Maracaibo hasta las manos de la señora María Cárdenas.

En otrora, las mujeres de las cercanías lavaban sus ropas en las azules y cristalinas aguas del Lago de Maracaibo. En cambio en este tiempo que está contaminado, su rivera cambió de tono a azul verdoso.

Pasando los años, para este 2023, se espera la conmemoración de los 200 años de la Batalla del Lago y la Armada Naval el 24 de junio. Evento en el cual, estaría programada la visita del presidente de la República Nicolás Maduro, entre otras autoridades del Ejecutivo nacional, para ver los ejercicios militares en la Vereda del Lago.

El tren ejecutivo de los tres niveles de Gobierno que se reunierán en el lugar, se encontraran con orillas llenas de algas verdes, restos de petróleo y un olor putrefacto, el cual viaja por varios metros a la redonda al soplar del viento.

Durante un recorrido realizado por el equipo de Foco Informativo, se logró ver las costas del Lago con una capa negra de petróleo, así como pescados, producto de la contaminación existente.

Gustavo Carrasquel, director general de la Fundación Azul Ambientalista, a través de una entrevista telefónica con Foco Informativo explicó que hay una perdida considerable de biodiversidad en el Lago de Maracaibo. «Son muchos años de contaminación a la que ha estado expuesto el ecosistema lacustre».

«Los hidrocarburos forman con el agua una capa impermeable que obstaculiza el paso de la luz solar que utiliza el fitoplancton y otros microorganismos, para realizar el proceso de la fotosíntesis, interfiere el intercambio gaseoso, cubren la piel y las branquias de los animales acuáticos provocándoles la muerte por asfixia», explicó.

Puntualizó además que los derrames que se están evidenciando en las costas del Lago de Maracaibo, puede volverse inhabitable para flora y fauna, peces, cangrejos, delfines, manatíes, y en mayor grado, las aves se ven afectados.

«Los venenos eliminan gradualmente los suministros de alimentos, y el petróleo que recubre las zonas destruye el hábitat», puntualizó.

En cuanto a las aves, a principios de junio a través de las redes se publicó el video de un Cormorán o Cotua, llena de petróleo a las afueras de las oficinas de Pequiven, según la cuenta de Instagram de Mapache Ecosistema, el ave tenía aproximadamente siete días tratando de quitarse el hidrocarburo de las plumas.

«En referencia a las aves, el petróleo destruye la capacidad que tienen las plumas de repeler el agua. Como resultado, sin poder repeler el agua y aislarse de las temperaturas frías, estos animales generalmente mueren por hipotermia. Pero además, se intoxican intentando remover el petróleo de sus cuerpos», explicó Carrasquel.

Fuente de trabajo y economía del estado

En el espacio lacustre de agua dulce, son varias las especies que se puede encontrar, la cual a causa de la contaminación existente mermó un poco, los pescadores han tenido que cambiar su lugar de pesca adentrándose un poco al mar, donde hacen un buen día de trabajo, sin especies expuestas a las toxinas.

Lo mismo pasó con la creciente empresa camarronera, la cual también, según los ambientalistas tiran sus aguas residuales al Lago de Maracaibo. Las granjas camaroneras, grandes y pequeñas, están apareciendo por todas partes, convirtiendo las tierras bajas y propensas a inundaciones que conforman la cuenca de Maracaibo en un entramado de piscinas enormes en las que crecen los camarones de color naranja oscuro preferidos por los comensales en muchas partes de Europa y Asia, reseñó Bloomberg.

Por otro lado se encuentra la industria petrolera, la cual es una de las más prominente en el estuario, el pasado 17 de marzo un trabajo de la agencia Bloomberg reseñó que la Corporación Chevron está instando a Venezuela a limpiar el lago de Maracaibo con la esperanza de casi duplicar la cantidad de petróleo que se puede cargar en sus barcos, que actualmente corren el riesgo de encallar debido a la acumulación de sedimentos.

La empresa estadounidense estaría realizando un estudio para guiar el trabajo de dragado que luego PDVSA llevaría a cabo a través de un contratista. Ese dragado podría permitir que los barcos de Chevron aumenten sus cargamentos actuales a 400 mil barriles, en comparación con los 250 mil actuales, apenas unos meses después de que EEUU relajara las restricciones para operar en el país latinoamericano.

Según el trabajo de la agencia de noticia internacional, la contaminación creciente en el Coquivacoa como lo llamaban los indígenas de la zona, podría afectar la exportación del hidrocarburo.

Pelea por hábitat

Carrasquel comentó además que existe otro problema en el ecosistema lacustre, el aumento de la colonización de algas cianófitas, (Cyanophyta, literalmente «plantas azules»), o Cyanobacteria, los cuales son organismos microscópicos que en el pasado le deban un tono azul verdoso al Lago de Maracaibo.

«El problema es que estás diminutas algas, ahora crecen en mayor proporción, compitiendo con la Lemna«, expresó.

Por causa de esta situación es el intenso olor putrefacto que emana del Lago de Maracaibo, la descomposición orgánica, y emanación de gases en las orillas.

«En el caso de las Algas Cianofitas, por años hemos alertado y solicitado, mayor control e inspección en los vertidos, vengan del agro o de industrias como las camaroneras. La falta de Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales, presionan al Lago, con vertidos de aguas cloacales. Mucho Nitrógeno, mucho Fósforo le vierten al Lago», aseveró.

Conciencia saneadora

El director de la Fundación Azul Ambientalista comentó que propios y visitantes del Zulia deben tomar mayor conciencia ecológica, para tratar de no dañar más el estuario.

«Tomar conciencia, ser más exigentes en cuanto a las condiciones en que se ha degradado a el Lago. Cumplir y exigir se cumplan las leyes, colaborar con las ONGs que luchan por la restauración y conservación de nuestro Lago», puntualizó.

El también periodista manifestó que durante años han alertado sobre este daño al ecosistema del Lago de Maracaibo.

«Por más de una década hemos acudido al ICLAM, el ahora MINEC, PDVSA. Nunca prestaron atención. Ahora es que observamos aunque sea respuestas mediáticas por parte de PDVSA», comentó.

Por último comentó que simples jornadas de limpieza ya no bastan. «El daño al ecosistema podría ser en algunos casos irreversible. Pero si se pueden sanear la orillas«.

 

Por: Evelis Borjes / Foto: Lizaura Noriega