Dos sismos, de magnitud 5,4 y 4,7, sacudieron durante la tarde de este miércoles a la localidad costera de Chala, en la región peruana de Arequipa, sin que hasta el momento se reporten daños personales o materiales, informó el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).
El primer sismo se registró a las 17.52 horas (22.52 GMT) y alcanzó una magnitud de 5,4, con epicentro ubicado a 53 kilómetros al sur de Chala, en el océano Pacífico.
De acuerdo con el reporte oficial, el movimiento se originó a una profundidad de 35 kilómetros y alcanzó una intensidad IV en Chala
El Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) señaló que el temblor «fue sentido moderado por la población» y «no se reportan daños al momento», pero la supervisión de las autoridades «continúa en zonas vulnerables» de esa localidad.
Minutos después, a las 18.08 horas (23.08 GMT), se produjo un segundo sismo en la zona, de magnitud 4,7 y con epicentro a 51 kilómetros al sur de Chala, también en el océano Pacífico.
Este movimiento se originó a 51 kilómetros de profundidad y alcanzó intensidad III en Chala.
Reactivación sísmica
Estos sismos se produjeron dos días después de que el Ministerio del Ambiente informara que la reactivación temporal de la falla Colihuire-Huatajcucho, también en Arequipa, provocó pequeños y medianos sismos y 108 réplicas durante tres días consecutivos en la región de Caylloma sin que se produzcan víctimas.
Este lunes, el Indeci reportó que 26 viviendas, tres templos religiosos y una oficina pública fueron afectados, así como 330 metros de camino rural, en los distritos de Maca, Lari, Yanque, Ichupampa, Tuti y Cabanaconde.
El más fuerte de estos sismos ocurrió durante la noche del viernes pasado y tuvo una magnitud 5,2, lo que produjo el colapso de viviendas de material precario y deslizamientos y derrumbes que interrumpieron vías de comunicación.
Perú se ubica en la zona denominada Cinturón de Fuego del Pacífico, donde se registra aproximadamente el 85 % de la actividad sísmica mundial.
El último terremoto devastador en el país andino se produjo en 2007 en la sureña región de Ica, donde un movimiento de magnitud 7,9 dejó más de 500 fallecidos, así como millonarias pérdidas en infraestructura y viviendas.
Por Agencia