Alrededor de 3.000 migrantes iniciaron este domingo 23 de abril en el sur de México una caravana que denominaron «Viacrucis migrante» para exigir justicia por la muerte de 40 personas en el incendio en una estación migratoria de Ciudad Juárez en marzo.
El contingente partió a primera hora de Tapachula, en la frontera con Guatemala, con destino a la Ciudad de México para reclamar al gobierno que castigue a los responsables de la tragedia.
Irineo Mújica, de la organización Pueblos Sin Fronteras y quien convocó a esta movilización, dijo que están pidiendo que el titular del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño, sea juzgado, se cierren definitivamente todas las estaciones migratorias del país, se desmilitarice al INM y que se ofrezcan formas ágiles de regularización para los migrantes.
«En este viacrucis le pedimos al gobierno justicia por los asesinados, que dejen de esconder a los altos mandos, pedimos también que estas cárceles (alude a las estaciones migratorias) se terminen; pedimos también la desaparición del Instituto Nacional de Migración», expresó el defensor desde el Parque Bicentenario de Tapachula, previo al comienzo de la caravana, así lo reseñó Tal Cual.
Los migrantes portaban una cruz de madera y mantas con consignas en que culpan al gobierno mexicano de la tragedia en Ciudad Juárez. «El Estado los mató», «Crimen de Estado», «Viacrucis a los migrantes», decían.
De acuerdo con los organizadores, esperan llegar en poco más de una semana a la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México para exponer sus demandas.
No se registró una caravana tan numerosa desde junio del 2022, cuando unos 7.000 migrantes marcharon en el marco de la celebración de la Cumbre de las Américas en Los Ángeles. Desde entonces, los pequeños grupos han intentado salir de Tapachula, la ciudad que algunos migrantes consideran una gran cárcel migratoria por las dificultades que enfrentan para salir y continuar su camino en procura de regularización.
Por: Agencia