El papa Francisco se despidió hoy de Sudan del Sur deseando esperanza y reconciliación para un país que tanto sufre tras una sangrienta guerra civil y una gran crisis humanitaria, pero también a todo el continente africano.
«Esperanza es la palabra que quisiera dejarle a cada uno de ustedes, como un don para compartir, como una semilla que dé fruto», dijo Francisco en una multitudinaria mis.
Y agregó que la esperanza, especialmente aquí, se encuentra en el signo de la mujer y por eso quisiera agradecer y bendecir de modo especial a todas las mujeres del país.
En la misa en Yuba, Francisco había reiterado su llamamiento para que se depongan las armas del odio y la venganza en un país que intenta que se implementen los acuerdos de paz tras una sangrienta guerra civil.
Su intención era que se implementase completamente el acuerdo de paz que se firmó entre las diferentes facciones en 2018.
Por el momento, el papa arrancó al presidente Salva Kiir Mayardit la promesa que levantará el bloqueo que mantenía para sentarse a negociar el acuerdo de paz con los grupos de la resistencia.
Por Agencia