Las autoridades cubanas lamentaron el lunes que los beisbolistas de la isla que juegan en equipos de las Grandes Ligas de Estados Unidos y que participarán en el próximo Clásico Mundial de Béisbol solo hayan sido autorizados a incorporarse a la selección pocos días antes y se les prohibiera además viajar a la nación caribeña, incluso si ganan el torneo.
“Es totalmente discriminatorio que los peloteros cubanos, por el solo hecho de tener residencia en Estados Unidos, no puedan venir a Cuba ni a entrenar, ni siquiera, si ganamos el Clásico, a celebrar”, dijo a The Associated Press Miguel Fraga, un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba.
Se trata de la primera vez que Cuba, potencia del béisbol, pero enfrentada al profesionalismo por décadas, convocó a peloteros de las Grandes Ligas.
Los comentarios se sumaron a un comunicado de la Federación Cubana de Beisbol (FCB) de este mismo lunes, según la cual los organizadores de la quinta edición de Clásico Mundial, a jugarse entre el 8 al 21 de marzo, informaron oficialmente a esa entidad sobre las restricciones para los atletas “sean de MLB o no” pero con residencia en el vecino país, de “viajar a Cuba para participar en cualquier acción relacionada con el certamen”.
Según el comunicado de la federación, otra de las limitaciones consiste en que ninguno de los deportistas que se acojan a “la licencia podrá participar en los entrenamientos y juegos de preparación pre-competencia que la selección cubana tiene previsto desarrollar en el extranjero”. Solo podrán incorporarse al equipo el 3 de marzo.
Estados Unidos mantiene férreas sanciones económicas contra Cuba, presionando un cambio de modelo político, y los nexos entre ambos países son tensos.
Hasta ahora se desconoce qué decidirán los jugadores con base en estas limitaciones, pero la federación dijo que seguirá adelante con su preparación para el Clásico.
En un cambio en su filosofía, que durante décadas buscó castigar a los atletas que abandonaban el país, Cuba decidió citar a profesionales. En años recientes, mucho talento salió de la isla seducidos por los millonarios contratos de los equipos de Estados Unidos.
Inicialmente, se convocó a 50 peloteros, de ellos más de media docena de astros de MLB, sobresaliendo el tercera base Yoán Moncada y el jardinero central Luis Robert, ambos de los White Sox de Chicago.
También aceptaron el llamado, el infielder Andy Ibáñez (Tigers de Detroit); el jardinero Lázaro Armenteros y el lanzador Luis Miguel Romero (Atléticos de Oakland) y el lanzador Rolando Bolaños (Royals de Kansas City) y el jardinero Yoenis Céspedes, dos veces convocado para el Juego de Estrellas de Grandes Ligas. No ha actuado con las Mayores desde 2018 tras desvincularse de los Mets.
Junto a ellos se emplazó a otros que militan en el extranjero — México, República Dominicana y Japón — pero cuya participación requiere de menos permisos, como el caso del jardinero Yurisbel Gracial del equipo japonés Fukuoka SoftBank Hawks.
La lista definitiva de 30 jugadores será anunciada este martes, anunciaron las autoridades.
Fraga lamentó que las limitaciones impuestas por Estados Unidos terminen por perjudicar al deporte y al desempeño del seleccionado.
“Cualquier fanático, cualquier apasionada sabe que no es igual tener a todo el equipo listo, todo el equipo trabajando junto, saber cómo está la forma deportiva, cuáles son las cosas que hay que hacer más énfasis al hecho de vernos cinco días antes de un evento”, dijo Fraga.
Por: Agencia