Cientos de migrantes originarios de Venezuela se encuentran viviendo una crisis humanitaria en situación de calle, en el Sector de El Paso, Texas, tras haber realizado su entrada de manera ilegal por la frontera y ahora, solo les queda esperar un milagro para encontrar el anhelado “Sueño Americano” y tener una oportunidad de trabajo para mejorar su calidad de vida.
Actualmente, 600 migrantes venezolanos, se encuentran alrededor de la Iglesia El Sagrado Corazón, luego de burlar la vigilancia de la Patrulla Fronteriza y entrar de manera ilegal en los puntos 19, 32 y 36 del muro fronterizo a los que denominan el “hueco”, reseñó El Heraldo de Juárez.
Durante el lunes, por la madrugada, una de las familias venezolanas que estaba en la calle, indicó que ellos entraron de manera ilegal, ya que es la única manera de conseguir estar en Estados Unidos y no ser expulsados bajo el Título 42.
“Entramos en la madrugada, estaba lloviendo, llevaba a mi hija en brazos cuando cruzamos por el hueco, al pisar suelo estadounidense no quedó de otra que salir corriendo para escondernos de la Patrulla Fronteriza, yo me escondí, mientras que mi esposa corrió para otro lado”, contó el padre de familia sobre cómo fue su entrada a El Paso.
Del lugar donde entró, pagó 150 dólares a un conductor para que lo acercara hasta la Iglesia, donde se reencontró con su esposa, ya que es ahí la zona, donde la migra no los arresta por ser ilegales.
Entre las calles Oregon, father Rahm, Mesa y Fourth, se puede observar a todos los venezolanos platicando las historias de su travesía.
La mayoría del apoyo que reciben diariamente las personas en situación de movilidad, es por parte de la iglesia católica, al igual que de pastores, que les llevan ropa, cobijas, comida, café, agua.
“No podemos trabajar, nos tienen aquí todo el día, las autoridades de acá (EU), se acercan a ver si amanecimos bien y solo nos piden que nos portemos bien, que mantengamos limpia la calle, pero aunque ellos saben que estamos de manera ilegal no nos arrestan si estamos aquí”, contó un venezolano.
Por Agencia