Diecinueve personas murieron el miércoles en el centro de Somalia en un doble atentado con coche bomba reivindicado por los islamistas radicales del grupo Al Shabab.
El ataque ocurrió en horas de la mañana en Mahas, localidad situada a unos 300 kilómetros de la capital Mogadiscio, en la provincia de Hiran, donde se inició hace varios meses una amplia ofensiva contra los insurgentes dirigidos por clanes y el ejército somalí.
Este nuevo asalto demuestra que el grupo Al Shabab, que ha perdido terreno en esta región, sigue siendo capaz de realizar ataques mortales.
«Diecinueve personas, entre ellas miembros de las fuerzas de seguridad y civiles, murieron en las explosiones. Los terroristas (Shabab) detonaron dos coches cerca de una base militar en Mahas», localidad situada a unos 300 kilómetros de la capital, Mogadiscio, declaró Mohamed Moalim Adan.
«Alrededor de veinte personas murieron en la doble explosión, en su mayoría civiles, pero tales ataques nunca detendrán nuestros esfuerzos para eliminarlos», afirmó a la AFP un líder del clan local Abdikarim Hassan.
«Vi los cadáveres de nueve civiles, incluidos mujeres y niños. Fue un ataque horrible», contó Adan Hassan, un testigo.
Según otro responsable del clan, Mohamud Suleyman, unas cincuenta personas también habrían resultado heridas por las detonaciones.
En un comunicado, Al Shabaab afirmó haber atacado «bases militares».
Shabab, un grupo afiliado a Al Qaida, ha estado luchando contra el gobierno federal que tiene el apoyo de la comunidad internacional desde 2007.
Expulsados de las principales ciudades del país entre 2011 y 2012, permanecen sólidamente establecidos en extendidas áreas rurales.
«Guerra total»
A principios de julio, los clanes de la provincia de Hiran se rebelaron contra los insurgentes islamistas.
El gobierno de Hassan Sheikh Mohamoud, que ha prometido una «guerra total» contra el grupo islamista, envió en septiembre al ejército -incluidas fuerzas especiales- para apoyar a estas milicias conocidas como «macawisley».
Esta ofensiva, apoyada por la fuerza de la Unión Africana en Somalia (Atmis) y los ataques aéreos estadounidenses, permitió reconquistar importantes territorios en dos estados del centro del país, Hirshabelle -donde se halla la provincia de Hiran- y Galmudug.
El ejecutivo afirmó a principios de diciembre haber recuperado Adan Yabal, una localidad emblemática de Hirshabelle custodiada por Al Shabab desde 2016 y presentada como un «campo de entrenamiento» y un nudo logístico de los insurgentes en la región.
Sin embargo, los miembros de Al Shabab continúan lanzando ataques sangrientos como represalia.
El 29 de octubre, dos coches bomba explotaron con pocos minutos de diferencia en la capital Mogadiscio, matando a 121 personas e hiriendo a otras 333, en el ataque más mortífero en el país del Cuerno de África en cinco años.
Un triple ataque en Beledweyne (centro), capital de la provincia de Hiran, también sesgó la vida de 30 personas, incluidos funcionarios locales, a principios de octubre, y al menos 21 clientes de un hotel en Mogadiscio fallecieron previamente en agosto en un asalto de 30 horas.
El presidente anunció que nuevos contingentes de soldados somalíes, entrenados en Eritrea, se desplegarían próximamente en las operaciones contra Al Shabab.
Por: Agencias / Foto: Cortesía