viernes, noviembre 22

Cicpc analiza todos los elementos del homicidio – suicidio ocurrido en Maracaibo

Conmoción ha generado el asesinato de Paola Carolina Rincón Perdomo (38), quien fue murió a balazos propinados por parte de su expareja Hervis José Castillo Govea (52), la mañana de este 26 de diciembre, cuando la misma se disponía a cumplir con su rutina de ejercicios en el CJ Gym, ubicado en el centro comercial Punta de Mata, en el oeste de Maracaibo.

Los investigadores del Cicpc tratan de desentramar el caso que a primeras de cambio luce como un hecho derivado de la separación formal de la relación, y que generó la irracional medida de Castillo de acabar con la vida de su «amor» y la de él, al dispararse en la cabeza.

Familiares indicaron a los funcionarios que la relación entre Rincón y Castillo se rompió definitivamente hace unos 15 días.

Al separarse, Rincón Perdomo habría dejado todo lo que habían forjado con el trabajo a potestad de Castillo. Se trata del negocio Artes Blindados, donde se fabrican puertas blindadas el cual está ubicado en la Circunvalación 1, cerca al puente de Socorro, y un minimarket establecido en el sector Cañada Honda.

Con la decisión, la mujer no tendría lazo alguno con Castillo, pero el hombre empecinado en regresar lo que ya alguna vez hubo entre ellos, habría sorprendido este lunes a Rincón Perdomo cuando llegaba en su camioneta Four Runner Vinotinto al acostumbrado sitio de entrenamiento y la abordó con el ánimo de ejecutar su plan.

Fue un vigilante del centro comercial quien advirtió que la mujer nunca descendió de la unidad y decidió comunicar a los propietarios del gimnasio que algo ocurría en la camioneta con la intención que se comunicaran con la amante del fitness y saber si algo ocurría.

Una amiga decidió llamar a Paola Carolina y al ver que no respondía fue hasta la camioneta con un compañero de ejercicios y se percatan de la presencia de los dos cadáveres.

Ella presentaba dos heridas por arma de fuego (intercostal derecha y temporal del mismo lado) mientras que él se había disparado en la sien. El arma incriminada quedó en posesión de Castillo. La policía la identificó como un revólver calibre 38, marca Smith and Wesson.

Una imagen que se filtró a los medios muestra a la mujer con el cinturón de seguridad en la mano, lo que hace presumir que trató de escapar antes de ser alcanzada por los disparos.

Las investigaciones tratan de terminar muchos elementos para expresar una conclusión sobre este hecho que ha dejado una estela de dolor entre quienes los conocieron como pareja.

Por lo pronto iniciaron con las entrevistas a los familiares de ambos, el análisis de los vídeos del lugar, el cruce de llamadas entre ambos, y otros detalles de interés criminalístico.

Por: Redacción Sucesos