Los exintegrantes del último gabinete de ministros en Perú acudieron este viernes a la sede del Ministerio Público para responder como testigos en la investigación abierta contra el destituido expresidente Pedro Castillo por el presunto delito de rebelión, tras haber ordenado la disolución del Congreso.
Durante esta jornada, acudieron a la Fiscalía los exministros de Defensa Gustavo Bobbio, de Trabajo Alejandro Salas, de Salud Kelly Portalatino, de Comercio Exterior Roberto Sánchez, de Justicia Félix Chero y de Relaciones Exteriores César Landa.
Algunos de los exministros declararon a la prensa y reiteraron que desconocían la decisión de Castillo de cerrar el Congreso e instaurar un Gobierno de emergencia, así como la intervención del sistema judicial.
Bobbio declaró a los periodistas que «no sabía» del mensaje a la nación que Castillo dio el miércoles, desde el Palacio de Gobierno, porque él había jurado al cargo un día antes y que tampoco llegó a participar en un Consejo de Ministros.
A pesar de que estuvo presente en el momento en que Castillo hizo su anuncio, Bobbio agregó que no tenía «la menor idea» de quién escribió el mensaje leído por el exmandatario en el que ordenó el cierre del Congreso y que fue considerado como un golpe de Estado.
Tras escuchar el anuncio, Bobbio le dijo al asesor de la presidencia del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, que aquello «no podía ser» y que sintió «una sensación de incredulidad».
A su vez, Salas, uno de los exministros más cercanos a Castillo, dijo que se arrepentía de haber integrado el Ejecutivo después de lo ocurrido.
«El mensaje fue absolutamente sorpresivo, mi lealtad estuvo presente y vigente hasta que la democracia en el país se mantuvo», afirmó Salas a los periodistas a su salida de la Fiscalía.
El extitular de Cultura y de Trabajo añadió que cuando escuchó el mensaje a la nación «donde se irrumpía el orden democrático, en ese momento supe que mi compromiso estaba con mi país y con mi familia, y que no podía seguir un minuto más».
La expresidenta del Consejo de Ministros Betssy Chávez no acudió a la citación de la Fiscalía, en tanto la prensa publicó unas supuestas coordinaciones con el resto del gabinete en las que les pedía que acudieran a Palacio de Gobierno por que se trataba de un «día histórico».
Los exintegrantes del gabinete renunciaron, uno tras otro, después del mensaje de Castillo y se pronunciaron en redes sociales contra la medida del entonces mandatario, mientras que el Congreso votó por su destitución y minutos después fue detenido por incurrir presuntamente en el delito de rebelión.
Por: Agencia