Luego que activistas en pro de la comunidad LGBTI estuvieron encadenados a las puertas de la Defensoría del Pueblo por varios días con distintas exigencias, lograron que se permitiera el cambio de nombre de acuerdo con su orientación sexual.
La ley está vigente desde el 2010, pero el CNE solo les permitía esto a las personas que no eran transexuales.
Tamara Adrián, profesora, abogada, doctora en derecho comercial y activista de derechos de la diversidad sexual, aseguró, en entrevista con Román Lozinski, que esto es un simple cambio de nombre, que no implica el cambio de sexo en la documentación.
“Esto no es suficiente, no es un reconocimiento de identidad”, añadió.
Explicó que a estas personas les cuesta mucho conseguir trabajo y vivienda, por eso en la práctica, los derechos más fundamentales de la comunidad quedan truncados
Adrián indicó que la sentencia que acepta la copaternidad es la única que ha tenido ciertos avances, porque dice tener carácter vinculante.
“Venezuela es el único país de habla hispana que criminaliza las relaciones del mismo sexo aunque limitado solo al ámbito militar”, acotó.
Por: Agencia / Foto: Cortesía