La policía investiga una carta enviada al presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, que contenía una bala, un teléfono móvil, un pedido de un millón de euros y una cuenta bancaria en la que debería ser ingresado el dinero, misiva a la que el mandatario restó importancia.
“No le doy una particular importancia, esto ocurre. Es parte de la vida«, dijo el mandatario al canal de televisión Correio da Manha y explicó que ya había recibido amenazas, “una o dos veces”, tras asumir la presidencia, y varias más durante su etapa anterior como comentarista televisivo.
El suceso, agregó, ocurrió hace algunas semanas y la carta, anónima, fue remitida a su residencia oficial, el Palacio de Belén, y fue abierta por los servicios de seguridad que la remitieron a la policía.
“La vida continúa y continúo con mi vida normal. No hay razón para ningún tipo de alarma ni de preocupación», insistió el presidente de Portugal.
Por: Agencia