La gala de los Oscar fue seguida en directo por 10,4 millones de espectadores en Estados Unidos, el peor registro de su historia y muy por debajo de los más de 23 millones que conectaron con la ceremonia el año pasado.
Los datos de audiencia se confirmaron este martes y mejoraron las previsiones de la consultora Nielsen, que en un informe preliminar había estimado 9 millones de espectadores, pero suponen una bajada de más del 55 % respecto a la última edición, que fue la menos seguida hasta este año.
No obstante, el declive de audiencia de los Oscar coincide con los malos resultados obtenidos por el resto de entregas de premios durante la pandemia: Los Grammy cayeron el 51 % y los Globos de Oro más del 62 %.
Incluso el Super Bowl, la final del fútbol americano que se celebró en condiciones más parecidas a la normalidad precoronavirus, vio un descenso cercano al 10 % en sus registros de audiencia.
Mientras la audiencia de las galas en directo continúa bajando año tras año, las tarifas de anuncios están elevando sus precios, ya que para los comerciantes cada vez es más difícil encontrar eventos que congreguen a audiencias multitudinarias.
La 93 edición de los Oscar se celebró desde Union Station, la estación central de Los Ángeles, que sirvió como sede alternativa para acoger un aforo de 170 invitados, lejos de los 3.000 que congregaba el Dolby Theatre de Hollywood.
Por: Agencia