El ascenso del Newcastle hasta convertirse en un equipo preparado para competir en la Liga de Campeones parecía inevitable tras la compra del club del noreste de Inglaterra por parte del fondo soberano de Arabia Saudí hace un año.
Pocos predijeron que ocurriría tan rápido.
Con una victoria por 2-1 sobre el Tottenham el domingo, el Newcastle subió al cuarto sitio de la Liga Premier, el último lugar que otorga un boleto para la Liga de Campeones, en otra prueba de las intenciones del equipo con la propiedad más rica del mundo.
La única derrota del Newcastle fue contra el Liverpool, y se produjo tras un gol en el tiempo de compensación. Ha habido empates contra el Manchester City y, apenas la semana pasada, contra el Manchester United.
Por lo tanto, no se trata de una casualidad por parte de un equipo que no tiene ninguna superestrella real -todavía- pero que está muy bien condicionado bajo el mando de Eddie Howe y tiene el mejor registro defensivo de la liga.
El Newcastle también tiene un goleador inesperado, Miguel Almirón, que marcó su quinto gol en otros tantos partidos.
El delantero paraguayo se deshizo de Ryan Sessegnon a los 40 minutos, superó a otro defensa, Clement Lenglet, y remató por debajo del portero Hugo Lloris.
Lloris tuvo un papel fundamental en el primer gol del Newcastle nueve minutos antes, después de que Callum Wilson le bloqueó tras salir a interceptar un balón jugado hacia delante. Con Lloris en el suelo, Wilson recogió el balón suelto y lanzó un disparo con la zurda por encima de Lloris y Eric Dier a puerta vacía.
Harry Kane anotó un tanto en los 54 para el Tottenham, que también fue superado 2-0 por el Manchester United en la semana.
Cuando el fondo soberano de Arabia Saudí compró el Newcastle, el equipo no había ganado y ocupaba el 19no puesto la temporada pasada.
Ahora, el Newcastle es cuarto y está a siete puntos del líder, el Arsenal, que empató 1-1 en el campo del Southampton y puso fin a su racha de ocho victorias en todas las competiciones. Fue la segunda vez que el Arsenal perdió puntos en la liga en 11 partidos.
La ventaja del Arsenal se sitúa ahora a dos puntos del Manchester City, con el Tottenham tres puntos atrás. Ha sido un buen fin de semana para el City, que ganó el sábado en Brighton por 3-1.
Marsch bajo presión
El técnico estadounidense Jesse Marsch es la víctima más reciente de la Liga Premier que siente la presión de sus propios fanáticos.
La derrota 3-2 del Leeds en casa ante el Fulham logró abucheos por parte de los hinchas. Hubo cánticos contra Marsch y la junta directiva del club en los últimos minutos del encuentro, en momentos en los que el Leeds se encuentra en la zona de descenso y en una racha perdedora de cuatro partidos.
El Aston Villa reacciona
Imagínense lo que Steven Gerrard estaba pensando cuando el Aston Villa se sacudió con una ventaja de tres goles sobre el Brentford tras apenas 14 minutos de partido.
Gerrard fue despedido el jueves tras un año a cargo, poco después de una derrota por 3-0 en Fulham, con el equipo en un mal nivel e inefectivo en el ataque.
El técnico interino Aaron Danks rápidamente sacó el partido a la delantera, ya que los tres jugadores -Leon Bailey, Danny Ings (2) y Ollie Watkins- marcaron en el 4-0 de Villa Park, que supuso la mayor victoria del equipo en la temporada .
Un mejor Leicester
Leicester salió de la zona de descenso. Y el Wolverhampton se ha hundido más en ella.
Con su segunda victoria por 4-0 en los últimos cinco partidos, los jugadores del Leicester están dejando atrás un terrible arranque de la temporada que dejó a Brendan Rodgers bajo una gran presión.
Ahora es el Wolverhampton —que juega con un entrenador interino tras el despido de Bruno Lage a principios de mes— el que se encuentra en crisis tras su derrota más abultada de la temporada. Ningún equipo tiene más derrotas que las siete de los Wolves.
Por: Agencia