jueves, noviembre 21

Artista activista: Escena con Hu Jintao refleja la «lucha interna por el poder» en China

La expulsión de Hu Jintao «muestra la profunda realidad del núcleo de la sociedad comunista» y es «un muy pequeño vistazo» a «la continua lucha interna por el poder» en el Partido Comunista de China (PCCh) desde su fundación en 1921, dijo Ai Weiwei en una rueda de prensa celebrada este lunes (24.10.2022) en el Club de Corresponsales Extranjeros de Japón.

Ai conoció personalmente al expresidente Hu Jintao, quien asistió al funeral del padre de este reconocido artista y activista chino. En la conferencia, lo calificó como «un hombre muy calmado y razonable, pese a ser el líder del Partido Comunista» y aseguró que algunos lo veían como un líder «muy blando«.

«Sólo unos segundos sirven para reflejar la expulsión forzosa de un presidente«, guiado por la escolta del presidente y con el gesto simbólico de no dejarle mirar los papeles frente a él, «donde se supone que están escritos los nombres de la nueva cúpula de Xi (Jinping)«, mientras a su alrededor «nadie se movió«, señaló.

«Caras de póker»

El activista chino cree que la escena muestra «una gran nación de 1.400 millones de personas controlada por un grupo de gente que no tiene respeto, no sólo por las normas, sino que ni siquiera muestran tener sentimientos personales, emociones o siquiera amistad«.

Ai comparó el momento con una partida de póker en la que los miembros del partido eran los jugadores poniendo sus «caras de póker«. «Se parece mucho a un fotomontaje» porque «nadie se mueve ni parpadea. Simplemente, le obligan a salir. Pero eso muestra cuán despiadados son los altos dirigentes del Gobierno central«, afirmó Ai Weiwei.

«Desde mi punto de vista esa lucha nunca se detiene, en ninguna generación«, continúo el activista, que dijo sobre la nueva composición del partido único, de personas más afines y leales a Xi, que está destinada a «asegurar que su agenda política continuará«.

Si Xi Jinping cae, «estará en problemas«

La permanencia de Xi en el poder, que se aseguró este domingo un tercer mandado sin precedentes al frente del partido único chino, «supone también su supervivencia«.

«Si cae va estará realmente en problemas«, dijo Ai Weiwei, teniendo en cuenta que ha usado la corrupción como herramienta para purgar «selectivamente» a 4.000 o 5.000 funcionarios y a más de un centenar de generales, «gente que no le gustaba«, lo que convierte su potencial salida en «peligrosa para él y para la sociedad china«.

El artista declaró que los dirigentes chinos «ya no se preocupan tanto» por mejorar la economía y que, más bien, «quieren reinterpretar el orden mundial«: «No solo China sino también Rusia, [el presidente ruso, Vladimir] Putin también lo ha mencionado. No les gusta el modo en que ha diseñado el juego Occidente, que también tiene muchos problemas«, apuntó el artista disidente.

Hijo pródigo caído en desgracia

Ai Weiwei, de 65 años, celebró esta comparecencia aprovechando su estancia en Japón para recibir el Praemium Imperiale, el máximo galardón nipón de las artes, del que fue uno de los receptores este 2022 junto a figuras como el cineasta estadounidense Wim Wenders y el pianista y director de orquesta polaco Krystian Zimerman.

Hijo de un poeta venerado por los antiguos dirigentes comunistas, Ai Weiwei participó como arquitecto en el diseño del famoso estadio «Nido de pájaro» construido para los Juegos Olímpicos de Pekín de 2008. Pero cayó en desgracia al criticar al Gobierno chino y en 2011 estuvo 81 días encarcelado. Cuatro años después, se instaló en Alemania.

Por: Agencia