Juventus parece encarrilarse de nuevo, después de un par de semanas fatídicas.
Adrien Rabiot anotó un par de goles postreros para sumarlos a los tantos de Weston McKennie y Moise Kean el viernes, en la victoria de los Bianconeri por 4-0 sobre Empoli.
Pese a su segundo triunfo consecutivo, la Juve todavía está siete puntos detrás del líder de la Serie A, el Nápoli, habiendo jugado un partido más. Con todo, este fue un impulso para la confianza de la Vecchia Signora antes de un partido en el que está obligada a ganar como visitante ante Benfica en la Champions League.
Cualquier otro resultado que no sea una victoria el martes podría dejar fuera a Juventus de la competencia en la fase de grupos, después de la humillante derrota 2-0 frente a Maccabi Haifa.
Ese tropiezo llegó días después de que Juventus cayó también en la Serie A, por el mismo marcador, en contra del Milan.
Sin embargo, se las arregló para derrotar a Torino en el derbi de la ciudad la semana pasada y también recibió un incentivo con el regreso de Paul Pogba y Federico Chiesa a entrenar, aunque el dúo no estuvo listo para el compromiso del viernes.
El argentino Ángel Di María y Gleison Bremer también estuvieron ausentes por lesiones.
Juventus tuvo un arranque perfecto. Rabiot mandó un centro desde la izquierda que Kean remató de cabeza para abrir el marcador a los ocho minutos.
Kean volvió a rematar de cabeza, ahora desviado, desde una buena posición en la primera mitad, mientras que el portero Guglielmo Vicario repelió un tiro de McKennie a bocajarro.
McKennie consiguió su gol a los 56 con un remate de cabeza en un tiro de esquina.
Fue el primer gol para el estadounidense en la Serie A desde el 15 de enero en contra de Udinese. Su otro gol lo marcó en septiembre, en la derrota por 2-1 contra Paris Saint-Germain.
Por: Agencia