Cuando el Grupo de Acción Unificada para la Libertad Personal (Gaula), de Colombia, conoció que por la liberación de la niña secuestrada en Colón, estado Táchira, Venezuela, estaban extorsionando a la familia, “inició su trabajo de seguimiento silencioso, que lo llevó a descubrir quiénes, en Colombia, estaban detrás de este secuestro y por eso, el miércoles, luego de tres meses, dieron a conocer sus resultados”: tres mujeres aprehendidas, en dos tiempos.
De acuerdo al diario colombiano La Opinión, “ (…) el 9 de enero, la familia, que recién había llegado de Estados Unidos a pasar las fiestas de Fin de Año, reunió 5 mil dólares, que fueron entregados ese día por un allegado de completa confianza, quien fue citado en un centro comercial, ubicado en la Diagonal Santander con calle 10, de Cúcuta”, explicó.
“Supimos del pago y grabamos la entrega. A la cita, que fue pactada dentro de un almacén de víveres, llegó una mujer y con ella iniciamos el seguimiento”, dijo al periódico una fuente judicial.
“En esa primera entrega de la exigencia económica, las autoridades conocieron que la mujer que recibió el dinero fue Maira Catalina Guzmán Agudelo y de inmediato armaron las conexiones que ella tenía con los demás integrantes que participaron en el secuestro. Para el 13 de enero, una segunda entrega fue grabada en el mismo centro comercial; esta vez, en la plazoleta de comidas, y al encuentro llegó Shirley Carolina Cáceres, residente en el corregimiento El Pórtico, quien también quedó grabada por las autoridades, recibiendo 15 mil dólares”.
“Un día después -agregó-, el 14 de enero, un tercer pago de 40 mil dólares fue acordado, para un total de 60 mil que entregó la familia; sin embargo, ese mismo día, las autoridades de Venezuela lograron rescatar a la pequeña en Tucapé, sector Los Pinos de Táriba, capturando a los hombres que la tenían retenida”.
Ese mismo día –continuó-, las autoridades colombianas supieron que una tercera mujer estaba implicada en la participación del secuestro y era la que recibía el dinero que las otras dos recogían.
“Por eso, el 15 de enero, en un operativo de allanamiento en un conjunto residencial de Villa del Rosario, capturaron a Carmelina Parra Villa, quien fue sorprendida con tres armas de fuego, 35 millones de pesos en efectivo y 20 mil euros”.
“Esta mujer es la compañera sentimental de José Domingo González Santiago, alias Cepillo, quien está preso desde el 2017, luego de ser señalado como jefe de una peligrosa banda que delinque en la frontera. La mujer quedó a disposición de la Fiscalía por el delito de porte ilegal de armas de fuego”, añadió la fuente.
“Con las dos mujeres identificadas y una de ellas capturada, las autoridades iniciaron todo el proceso en contra de estas y las vincularon en el secuestro de la menor; sin embargo, Guzmán Agudelo decidió irse de la ciudad y radicarse en Valledupar, creyendo que podría escaparse de las autoridades, pero cuando ya tenían todo en contra de ella, le cumplieron la orden de captura, la noche del martes; entre tanto, la madrugada del miércoles, pusieron a disposición de la autoridad competente a Shirley Carolina Cáceres, quien fue detenida en su casa”.
Las tres mujeres y alias Cepillo son señalados de participar en el secuestro de la menor, de nacionalidad estadounidense, pero de padres colombo-venezolanos.
Explica además que, tras el secuestro de la niña de 4 años, nacida en estados Unidos, la mañana del 1° de enero de 2021, en San Juan de Colón, dos hombres irrumpieron en la celebración del Año Nuevo y se la llevaron con rumbo desconocido; al día siguiente, la familia fue contactada por los secuestradores, que a través de teléfonos colombianos comenzaron a pedirles dinero a cambio de dejarla en libertad. Exigían el pago de 100 mil dólares, que debían ser entregados en Cúcuta.
Por: Agencia