El ataúd con los restos mortales de Isabel II fue sacado el martes por ocho portadores de la catedral de Saint Giles de Edimburgo, desde cuyo aeropuerto debe ser trasladado en avión hasta Londres donde permanecerá durante cinco días en una capilla ardiente.
Los escoceses, algunos con lágrimas en los ojos, pudieron despedirse de su reina, fallecida el jueves a los 96 años, durante las 24 horas que el féretro permaneció en la catedral. El féretro debe llegar en avión hacia las 20H00 (19H00 GMT) a Londres, donde pasará la noche en el Palacio de Buckingham, reseñó AFP.
Por Agencia