La región de América se convirtió en el epicentro del brote de viruela del mono, con la mayor cantidad de casos en el mundo, alertó este miércoles la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Hasta el 6 de septiembre se han notificado más de 30 mil casos de viruela del mono en América, especialmente en Estados Unidos, Brasil, Perú y Canadá, informó la directora de la OPS, Carissa Etienne, en rueda de prensa virtual.
La mayoría de ellos se han detectado en hombres que practican sexo con hombres. Sin embargo, también se tiene constancia de al menos 145 casos en mujeres y 54 entre menores de 18 años, especificó.
Hasta el momento, se han notificado cuatro muertes relacionadas con la viruela símica en Brasil, Cuba y Ecuador.
Como las vacunas contra la viruela símica son limitadas, la OPS recomienda que se dé prioridad a los grupos de alto riesgo y a la comunicación. De esta forma esperan evitar el estigma y la discriminación de la comunidad LGBTQ+.
«El estigma no tiene cabida en la salud pública» e impide que las personas en riesgo se hagan pruebas cuando presentan síntomas, afirmó Etienne.
«Si no somos proactivos para superar estas barreras, la viruela del mono se propagará en silencio», advirtió.
La OPS en un acuerdo con el laboratorio Bavarian Nordic proporcionará 100 mil dosis de vacunas a los países de América Latina y el Caribe a través del fondo rotatorio. La fecha de distribución será el 12 de este mes de septiembre.
Pero Etienne insistió en que las vacunas «solo complementan» otras medidas como la vigilancia, los test y las pruebas de rastreo de contactos y aunque se pueden administrar de forma preventiva, por ejemplo al personal sanitario, no se recomienda la vacunación masiva.
Los virus como los de la viruela símica, que están compuestos por un material genético de ADN, presentan «un proceso de evolución y acumulación de mutaciones» normalmente más lento que los del covid-19, dijo Jairo Andrés Méndez Rico, asesor de enfermedades virales emergentes en la OPS.
Aunque en algunos países ya se observa «microevolución» que podría generar sublinajes, explicó.
Aún así, «hasta el momento ningún cambio se ha visto asociado a una mayor capacidad de transmisión», precisó en la rueda de prensa.
En estas circunstancias y en una región donde muchos países dependen del turismo, Ciro Ugarte, director de emergencias sanitarias de la OPS, aconsejó privilegiar la información para que los turistas y nacionales que regresan sepan a dónde acudir en caso de síntomas.
«No debería haber ninguna restricción respecto a los viajes», reiteró.
Más allá de la viruela símica, la OPS sigue preocupada por el COVID-19.
Los casos, hospitalizaciones y muertes por COVID-19 han disminuido en América aunque la semana pasada se han registrado 4.954 fallecimientos, según la OPS.
Por: Agencia