La Organización Panamericana de la Salud dijo el miércoles que los países de Latinoamérica y El Caribe son los que más vacunas necesitan en todo el mundo y pidió a las naciones desarrolladas que sean solidarias y si tienen más dosis de las que requieren se las entreguen a los que menos acceso han tenido a la inmunización.
“Los países de América Latina y El Caribe han soportado lo peor de la pandemia”, expresó la directora de la OPS, Carissa Etiene. “Abogamos para que se priorice esta región con la distribución de vacunas”, dijo tras destacar que la de coronavirus es una pandemia global y nadie estará a salvo hasta que todos lo estén.
Las declaraciones de Etienne en la rueda de prensa virtual de la OPS desde su sede en Washington tienen lugar en momentos que la pandemia continúa golpeando al mundo y a los países de las Américas. En la última semana se registraron más de 1,5 millones de casos de COVID-19 y cerca de 40.000 muertes en la región, de acuerdo con información de la OPS que se basa en datos suministrados por los países.
De los tres millones de muertos causados por la pandemia en todo el mundo hasta ahora, casi la mitad sucedieron en las Américas.
La región, una de las más desiguales del mundo, ha también tenido un acceso desigual a la vacunación.
En Chile, que firmó un acuerdo especial con China para recibir sus vacunas, cerca del 40,47% de la población ha recibido al menos una dosis de la inmunización, en Estados Unidos cerca del 39,24%, en Argentina el 12,15%, en Mexico el 8,68%, en Bolivia el 3,2% y en Perú el 2,25%, de acuerdo a un sitio especial de la Universidad de Oxford.
La OPS está encargada en la región de distribuir las vacunas de COVAX, el mecanismo creado por las Naciones Unidas y otros organismos internacionales para que los países tuvieran un acceso equitativo a la inmunización.
Ese objetivo, sin embargo, no ha conseguido debido a la escasez de vacunas y al hecho de que los países con más recursos acapararon gran parte de los contratos bilaterales con las farmacéuticas para asegurarse más dosis, limitando así la posibilidad de acceso de los de menos recursos, que dependen sobre todo de COVAX.
La desigualdad en el acceso se ha reflejado también internamente en los países, donde personas con más recursos han podido viajar a naciones con más disponibilidad de vacunas, o comprarlas.
“La inequidad que enfrentamos no puede resolverse sobre la base individual”, consideró Etienne, y pidió encontrar soluciones colectivas.
Hasta ahora COVAX ha entregado más de 4,2 millones de dosis en 29 países de las Américas y planea distribuir millones más en las próximas semanas. La meta es que al finalizar el año el 20% de la población de cada país, que representa a los grupos más vulnerables, esté vacunada.
El subdirector de la OPS, Jarbas Barbosa alertó que en México, Argentina y Brasil se están ofreciendo en mercados ilegales o través de las redes sociales dosis de vacunas falsas o que han sido robadas y no han respetado las cadenas de frío. Dijo que esas dosis representan un riesgo para la salud y que las personas deben asegurarse de que las vacunas que reciben estén garantizadas por el gobierno o las instituciones autorizadas.
Aunque algunos gobiernos y empresas privadas han comenzado a exigir una prueba de vacunación para permitir el ingreso a lugares concurridos y viajar, la OPS dijo que siguiendo los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud, no recomienda el uso del llamado pasaporte de viaje de vacunación.
“La OMS no recomendaría a los países que introduzcan un certificado que demuestre la vacunación contra el COVID-19 como condición para salir o entrar en un país o abordar, embarcar en un barco o avión”, expresó Ciro Ugarte, director de Emergencias en Salud de la OPS. Aclaró, no obstante, que eso podría cambiar si la vacunación es más amplia y llega a todos los países de la misma manera.
Tras destacar la importancia de la vacunación para controlar la pandemia, Etienne advirtió también que las teorías conspirativas y rumores maliciosos contra la inmunización representan un riesgo para la salud.
“La desinformación es más dañina cuando alimenta las dudas sobre la vacunación”, dijo Etienne.
“Necesitamos más vacunas contra el COVID para nuestra región. Necesitamos que los países rápidamente administren las dosis que tienen disponibles. Necesitamos que las comunidades tengan confianza en las vacunas”, expresó la funcionaria tras explicar que en países como Israel y Chile ya se está viendo cómo la inmunización está ayudando a disminuir las infecciones.
Por: Agencia