Greiver Salazar, de 18 años, sesgó la vida de quien fuera su novia Franyelis Vásquez, también de 18, luego de que ella decidió finiquitar la relación.
La vivienda del joven en el barrio Valle Verde, Puerto Cabello, estado Carabobo fue el escenario elegido por él para sostener una discusión que culminó cuando Salazar sacó un arma y la accionó en contra de la chica.
La joven fue trasladada al Hospital Adolfo Prince Lara, donde falleció a los pocos minutos de su ingreso víctima del disparo que recibió en la cabeza, según reseña El Pitazo.
Entre discusiones y santos
Vásquez y Salazar tenían una relación que era reprobada por las familias de ambos. Además, quienes los conocieron aseguraron que la pareja discutía a cada rato.
A la acalorada y cuestionada relación se suman el ingrediente de la Santería, religión que profesaba la muchacha y donde le aconsejaron que debía terminar la relación.
“A Franyelis, que practicaba la santería, de hecho, la llamábamos la ‘Santerita’, le llegaron a decir durante una sesión ritual que ese muchacho no le convenía, que cortara la relación”, indicó una de sus amigas, que no quiso identificarse.
Premeditado
La noche del lunes de 19 de abril, Salazar citó a la novia a su casa, pero antes pidió a un arma prestada. Casi a las 10.00 de la noche Vásquez, quien vivía en el mismo barrio, llegó y comenzó el intercambio de palabras en el que joven reclamaba más atención.
Cansada de la discusión, la chica dijo las palabras que desataron la ira de quien en ese momento dejó de ser el novio para convertirse en su asesino.
Una comisión de la Policía del estado Carabobo apresó al homicida cerca del lugar del crimen minutos después. Una versión no confirmada sostiene que el homicida se entregó de forma voluntaria a instancias de su madre.
Por: José Manuel Sánchez / Foto: Cortesía