Los equipos de rescate trabajan sin descanso para tratar de sacar con vida a Rahul, un niño de 10 años que lleva más de 90 horas atrapado en un pozo en el que se cayó el pasado viernes mientras jugaba en su aldea en el este de la India.
El joven se precipitó a primera hora de la tarde del viernes por un pozo en desuso de varios metros de profundidad en la aldea de Pihrid, en el estado de Chhattisgarh, y por el momento se encuentra «estable» y «receptivo», según informó este martes en Twitter la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF).
Las operaciones de búsqueda avanzan a través de un túnel paralelo que se está construyendo para facilitar su rescate, aunque la NDRF anotó que se están encontrando con rocas de gran dureza, lo que está suponiendo «un gran desafío» a la hora de perforarlas para avanzar, reseña EFE.
La oficina de la jefatura de Gobierno de Chhattisgarh aseguró en la misma red social que Rahul, «con gestos, solicitó algo de comida», al tiempo que destacó su «coraje».
Las autoridades indias mostraron imágenes de los operarios en un estrecho túnel con linternas, extrayendo tierra poco a poco para continuar avanzando con lentitud hacia el menor.
«Estamos tratando de sacarlo lo antes posible y brindarle la atención médica necesaria», subrayó Shukla, deseoso de que pronto la tensión acumulada se transforme en «esperanza».
La India vivió un episodio similar a finales de octubre de 2019, cuando el pequeño Sujith Wilson, de dos años, cayó a un pozo de unos 30 metros de profundidad en el sur del país.
El menor fue rescatado sin vida tras un rescate de más de 80 horas que conmovió a toda la nación.
Por: Agencia